Cuatro emigrantes africanos han sido abatidos hoy por la Policía egipcia mientras intentaban entrar en territorio israelí desde el desierto del Sinaí, en lo que se considera uno de los incidentes fronterizos más sangrientos de los últimos años.
Según han informado fuentes de seguridad, dos personas más de nacionalidad etíope resultaron heridas, una de ellas de gravedad, en el ataque producido a escasos días de que se celebre una reunión en El Cairo entre líderes egipcios e israelíes. No obstante, se desconoce la nacionalidad de los fallecidos ya que no iban identificados.
Desde el pasado mes de marzo la Policía egipcia ha abatido al menos a doce emigrantes africanos, poniendo fin a seis meses de relativa calma al tráfico humano desde Egipto.
Egipto, que ha sido durante años territorio de paso para miles de emigrantes, teme que el flujo masivo de personas en su estratégica frontera suponga una amenaza a la seguridad en el área que todavía sigue siendo testigo de atentados de milicianos islamistas.