Agentes de la Policía Nacional de la Jefatura Superior de Policía de La Rioja han detenido a dos hombres, de 34 y 26 años de edad, como presuntos autores de un Delito de Robo con Fuerza en una empresa, al ser sorprendidos robando. Accedieron mediante “escalo” a la empresa sita en el polígono empresarial de Cantabria y robaron gran cantidad de material y diversa maquinaria y herramientas.
Accedieron mediante “escalo”
Los hechos ocurrieron en la madrugada del pasado domingo, momento en el que varios indicativos son comisionados por la Sala del CIMACC-091 (el Centro Inteligente de Mando, Comunicación y Control) ya que se había activado la alarma en una Empresa del Polígono Industrial Cantabria y la empresa de seguridad estaba observando en su interior a dos personas.
Varias dotaciones de radio-patrulla acuden inmediatamente al lugar iniciándose una requisa en la empresa, y proceden a la búsqueda de los autores, observando dos varones al final de la nave, por lo que los agentes corren hacia dichos varones, interceptando a uno de ellos y observan al segundo descolgándose por una de las verjas perimetrales de la nave hacia el exterior, por lo que inician la persecución del mismo consiguiendo darle alcance a los pocos metros. Ambos varones son detenidos por un presunto Delito de Robo con Fuerza.
En ese mismo lugar, entre unos barrones, los agentes localizan una cizalla, una maza y numerosa cantidad de metros de cable de cobre que estaba siendo arrastrado por el que posteriormente sería detenido, y a los pocos metros del lugar se encontraron dos batidoras de hormigón y dos amoladoras de aire comprimido. Posteriormente el perjudicado, en la interposición de la denuncia hizo constar la valoración de los destrozos producidos en más de cuatro mil euros.
Los autores
Los autores son dos varones de 34 y 26 años, con domicilio ambos en la localidad de Mendavia (Navarra), uno de ellos carece de antecedentes y al otro le constan ocho reclamaciones cesadas y una detención.
'Plan nacional contra el robo de metales'
Los robos de metales como el acero y cobre han sido frecuentes en la última década, sobre todo a raíz del incremento del precio de este metal coincidiendo con la crisis económica. A nivel nacional existen bandas organizadas dedicadas al robo de cobre, un metal por el que se paga actualmente unos 10 euros por kilo. En algunas épocas se pagaba más todavía y existe una fuerte demanda de este metal procedente de China. Esto llevó a las Fuerzas de Seguridad del Estado a poner en marcha la operación Cobre para luchar contra este tipo de prácticas e incrementar la vigilancia sobre las chatarrerías que compraban el material robado.