La actividad del transporte de viajeros y mercancías de Renfe ha generado a la sociedad riojana un ahorro de 5,7 millones de euros en el año 2011, si se evalúa en términos económicos el impacto que habría tenido sobre el cambio climático, la contaminación o la tasa de accidentes la realización de esos mismos servicios ferroviarios a través de otros medios, como el avión, el camión o el automóvil.
Este supuesto además habría conducido a un aumento de las emisiones de CO2 por transporte en Navarra de 11.100 toneladas y un incremento en el consumo energético de más de 3.600 toneladas equivalentes de petróleo (TEP).
Son los datos del estudio anual de ahorro de costes externos, ahorro de huella de carbono y ahorro de consumo energético generado por los servicios de Renfe de acuerdo con la metodología contenida en el Estudio “Costes Externos del Transporte en Europa” publicado por la Consultora Ce Delft en noviembre de 2011.
El estudio recoge nuevas componentes y adapta la metodología anterior a los criterios del estudio “Internalisation Measures and Policies for All External Costs of Transport –IMPACT” (Medidas y Políticas de Internalización de todos los costes externos del transporte) encargado por la Dirección General de Transporte y Movilidad de la Comisión Europea (UE).
La contribución de Renfe al ahorro por costes externos en La Rioja está encabezada por los servicios de Alta Velocidad-Larga Distancia (2,7 millones), seguidos de los servicios de Mercancías (2,6 millones de euros) y los de Media Distancia (más de 300.000 euros).
En cuanto al origen de estos ahorros, los diversos servicios de Renfe evitaron en concepto de accidentes 2,3 millones de euros; al cambio climático unos costes cifrados en 2,7 millones de euros, y a la contaminación atmosférica 0,6 millones de euros. Estos son los tres principales componentes de coste, detrás de los cuales se sitúan efectos urbanos, ruido, afecciones sobre el paisaje y la naturaleza, ocupación y fragmentación del suelo y otros de carácter inducido.
La circulación de los trenes de mercancías en La Rioja resulta clave en la aportación de Renfe a la sostenibilidad medida a través del ahorro de costes externos. La cifra alcanzó los 2,6 millones de euros en 2011, el coste social que habría tenido transportar la misma carga mediante la circulación de 24.000 camiones.
Las externalidades producidas por los servicios ferroviarios de Renfe en España fueron entre cuatro y cinco veces menores que las generadas por los otros modos de transporte. Ascendieron a unos 400 millones de euros, mientras que el resto de modos habría generado unos costes externos de más de 1.900 millones de euros.
Renfe transportó el pasado año en España 465 millones de viajeros y 17 millones de toneladas de mercancías que, según la hipótesis de sustitución modal utilizada para analizar los costes externos que produce el sector del transporte, habrían requerido 304,2 millones de circulaciones de automóvil, 5,3 millones de circulaciones de autobuses, 3,7 millones de circulaciones de camiones y el vuelo de casi 80.200 aviones.
Las ventajas medioambientales de los trenes de mercancías son muy significativas si se toman como ejemplo circulaciones con grandes volúmenes. De acuerdo con la herramienta de cálculo Ecotransit2, un tren cargado con 190 vehículos entre Madrid y Barcelona emitiría un 80% menos de dióxido de carbono (CO2, gas de efecto invernadero) a la atmósfera que los 19 camiones (10 vehículos por camión) necesarios para transportar la misma carga. En el caso del consumo de energía primaria ese tren ahorraría hasta un 70%.