La empresa de componentes electrónicos Ikusi ha anunciado a sus trabajadores en Logroño que ha decidido iniciar el proceso de cierre de la planta, asentada en la capital riojana desde hace 21 años y que en la actualidad cuenta con treinta empleados.
Según un comunicado que ha remitido Ikusi a sus empleados, la empresa justifica esta decisión en que la planta no cuenta con los medios necesarios para adaptarse a la “mayor complejidad” de los procesos de fabricación de los componentes que se producen en Logroño.
Ikusi considera necesaria su decisión “por responsabilidad empresarial” y recuerda que en su planta principal, situada en San Sebastián y cuya plantilla la forman unos 400 trabajadores, se ha realizado una inversión “en pos de la competitividad necesaria para atender a esa complejidad”.
Así, para la empresa, en la situación de su fábrica de Logroño “confluyen causas técnicas, económicas, productivas y organizativas” que la hacen “inviable”.
CCOO en La Rioja, sindicato mayoritario en el comité de empresa, cree que “los precedentes que hay en el proceso no son buenos” porque “a finales de 2009 despidieron de forma improcedente a ocho trabajadores, fue la antesala de lo que han hecho hoy”, ha explicado el secretario general de Industria del sindicato, Jorge Ruano.
Respecto a la situación de la planta de Logroño, ha afirmado que, a falta de documentos oficiales, “creemos que no iba mal” y, “además, su carga de trabajo le llega de la central y, si quieren, tiene”.
Por ello, esperará a tener los documentos necesarios para negociar el cierre de la planta y “ver si pretenden acogerse a la nueva legislación laboral”, por lo que CCOO se mantendrá vigilante “por si pretenden ahora hacer los mismos trabajos de otra forma”, mediante subcontratas o acuerdos externos.