Un establecimiento con solera y otro de diseño. Unas bravas tradicionales y otras de alta cocina. Con unas te chupas los dedos y con las otras, también. La gastronomía riojana vuelve a aparecer en la cumbre. En este caso con el nombre de dos reconocidos establecimientos de la capital: el Jubera, en la calle Laurel, y el Tondeluna en pleno Espolón logroñés.
Ambos se han colado en la lista de los diez mejores establecimientos de España para comer patatas bravas elaborado por ICON de El País. Se codean con otros ocho bares y restaurantes donde comer en Valencia, Barcelona, Ponferrada, Madrid, Salamanca o Sevilla en el Olimpo de las bravas, un clásico mantenido por muchos y reinventado por otros, que gusta a casi todos.
En el caso del Tondeluna, el ranking señala a unas bravas elaboradas al estilo de Sergi Arola, un canutillo de patata relleno de dos salsas. Tampoco deja pasar la ocasión este reportaje de recomendar las míticas croquetas de la madre de Francis Paniego, un indispensable para todo aquel que pase por Logroño y quiera un regalo para su paladar.
Y, sin duda, no podía faltar en un listado de bares de bravas el tradicional Jubera. “Si un bar lleva la tira de años especializado en un plato y lleno hasta la bandera, será porque lo hacen estupendamente”, destaca el artículo. El Jubera, en plena calle Laurel, es ese lugar con sabor de siempre en el que, cuando alguien pide las brabas sin picante las llaman “raras”. Crujientes por fuera y tiernas por dentro, y siempre con pan para untar después.
Lo que está claro es que, teniéndolas tan cerca, y aunque la mayoría ya las hayamos catado, no podemos dejar pasar la oportunidad de degustar, más pronto que tarde, estos manjares encumbrados a los altares de una de las tapas más tradicionales del país.