La nueva ordenanza de terrazas prevé delimitar el espacio de las 314 terrazas que en la actualidad dispone Logroño, al tiempo que su horario se reduce en dos horas los días laborales al obligar a su cierre a partir de la medianoche.
El nuevo texto que se someterá a votación en el Pleno del 7 de mayo contempla la delimitación de la superficie en función del espacio y no del número de mesas, como hasta ahora y mantiene el horario actual de 9.00 a 2.00 horas los viernes, sábados y víspera de fiesta.
El portavoz del Gobierno municipal, Vicente Urquía, y el concejal de Movilidad, Domingo Dorado, han presentado hoy en rueda de prensa el contenido del acuerdo alcanzado en Junta de Gobierno Local.
Las zonas ordenadas para la instalación de terrazas afecta a las plazas del Mercado, Parlamento, Primero de Mayo, San Agustín, Fermín Gurbindo y Luis Braille. Quedan fuera de este proceso Gran Vía, aunque está previsto su ordenación, y Portales.
También destaca en el documento la instalación de terrazas completamente cerradas, aunque en este caso la concesión tendrá un carácter individualizado, y la colocación de calefactores con el fin de prolongar la posibilidad de disfrutar de estos espacios públicos en los meses menos cálidos.No obstante, se podrá optar también por terrazas con cerramientos laterales y tres caras, que deberán poder ser identificados por los invidentes, según explicó Dorado.
“Las terrazas forman parte del modelo de ciudad que queremos”, explicó, sin que ello suponga ocasionar problemas añadidos a los vecinos y ciudadanos.La aplicación del nuevo reglamento se prevé para mediados de julio. Los establecimientos también podrán colocar televisiones en sus terrazas, aunque sin sonido. La nueva ordenanza prohíbe los “colores vivos” en mesas, sillas y sombrillas.
Se trata de un “modelo nuevo”, que se acerca a la “visión europea” de estos espacios en “beneficio de los hosteleros” y “salvaguardando los intereses de los ciudadanos”, indicó Dorado.