Las obras para la consolidación de las actuaciones en el barrio de Madre de Dios con la urbanización de varias calles “avanzan a buen ritmo, cumplen los plazos previstos y estarán terminadas en mayo”, así lo ha explicado hoy el alcalde de Logroño. Pablo Hermoso de Mendoza ha visitado la zona junto con el concejal de Desarrollo Urbano Sostenible, Jaime Caballero, la concejala de Educación, Beatriz Nalda, y el director del IES Madre de Dios, Javier Hernáez.
El proyecto de urbanización se centra en el perímetro de la llamada plaza sin nombre, comprendido entre las calles Emilio Francés, Ruperto Gómez de Segura, 8 de Marzo y Cantabria. La obra se adjudicó por 830 847,57 euros a la empresa Calidad Organización y Vivienda, SL, de los cuales 648 049,77 están financiados gracias al Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia - Financiado por la Unión Europea – NextGenerationEU, a través de las ayudas del MITMA (Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana).
El barrio de Madre de Dios es una de las supermanzanas incluidas en el Plan de Movilidad Sostenible de Logroño. Durante la pandemia, se realizaron actuaciones que ampliaron las aceras, se peatonalizaron tramos, se reordenaron sentidos de circulación, se mejoraron las intersecciones y se crearon puertas de entradas. “Las obras de consolidación de estas actuaciones, con la misma calidad de las realizadas en otras zonas de la ciudad, con pavimiento granítico, mobiliario y nueva iluminación se pueden ver en algunos tramos ya casi realizadas, como en el entorno del CEIP Madre de Dios”, ha indicado Pablo Hermoso de Mendoza.
“El objetivo es consolidar la mejora del entorno de destinos frecuentes, como la Biblioteca Municipal Rafael Azcona y el CEIP Madre de Dios, dos espacios que contarán con una plaza pública ganada a los coches para el juego y el disfrute”, ha dicho.
“Toda esta zona se ha habilitado y regenerado atendiendo a un proceso participativo, tanto con la comunidad educativa del colegio Madre de Dios como de la asociación vecinal del barrio, que a lo largo de diferentes sesiones de trabajo han trasladado el entorno que quieren para esta zona”, ha señalado el alcalde de Logroño, Pablo Hermoso de Mendoza.
Según el concejal de Desarrollo Urbano Sostenible, Jaime Caballero, “vemos cómo avanzan las obras en el entorno de Madre de Dios, que finalizarán en mayo, tras una primera intervención en 2020 para ampliar los espacios peatonales del barrio y, además, lo hacíamos teniendo en cuenta los conceptos de supermanzana y área pacificada, recogidos en el PMUS de 2013. Unas actuaciones que obedecen a la creación de entornos más residenciales, más amables y evitar el tráfico de paso a través de un filtro modal, creado en los entornos del colegio y de la biblioteca Rafael Azcona. Así, se permite que tanto los residentes como las personas que tienen que acceder al barrio lo puedan hacer, pero sin atravesarlo de un extremo al otro con la consiguiente reducción del tráfico, del ruido y la ocupación de ese espacio por las personas, que han ganado espacio público”.
“Con esa actuación táctica se vio que en una semana se redujo enormemente el ruido y ese espacio fue ocupado por la infancia y la juventud, que entendió perfectamente esa transformación”, ha defendido Caballero. “Ahora con el pavimento, más personas pueden ver cuál es la ganancia del espacio y se convierte en una extención del patio del colegio y se puede continuar la convivencia puertas afuera”.
Esta actuación también pretende convertir el interior de las calles en vías de carácter más residencial, reducir su intensidad de tráfico motorizado y poder realizar una redistribución del espacio público para conseguir un entorno de encuentro y convivencia vecinal. “Son acciones que ya hemos comprobado durante el tiempo en el que las calles han estado con actuación táctica, hemos devuelto la vida de la gente a la calle, el juego de los niños, la biblioteca ganó una plaza pública como un nuevo espacio cultural”, ha explicado.
Pacificación del entorno Madre de Dios
La ordenación de tráfico quedará como se realizó en la actuación táctica, pero dejando este perímetro con una plataforma única de diferentes tipologías. Las características de la primera fase del proyecto son:
- La plaza junto a la biblioteca Rafael Azcona quedará como una zona de prioridad peatonal.
- La calle 8 de Marzo tendrá una plataforma única, pero con aceras y calzada diferenciada, los aparcamientos actuales pasarán a ser en línea para permitir ampliar las aceras actuales.
- Esa será la misma tipología de la calle Ruperto Gómez Segura entre la calle Quintiliano y Emilio Francés, a diferencia del tramo entre Quintiliano y calle
- Cantabria donde la calle, además de ser también de plataforma única, tendrá prioridad peatonal para facilitar el tránsito por todo el cruce y la incorporación a la calle Cantabria, que seguirá siendo peatonal.
- En la calle Cantabria se añaden zonas verdes y mobiliario para convertir este entorno en una ampliación del patio del colegio donde se pueda disfrutar del arbolado
Proceso participativo
Las actuaciones en Madre de Dios que se realizarán a partir de ahora han contado con un proceso participativo que comenzó en junio en la Biblioteca Rafael Azcona. Una sesión que dio paso a un proceso de recogida de datos con una encuesta que se distribuyó entre el vecindario.
Ha habido recorridos de reconocimiento que sirven para identificar los aspectos físicos, sociales y funcionales que influyen en la movilidad cotidiana desde la experiencia de las personas.
El 24 de junio empezaron las marchas exploratorias para recorrer el barrio con un grupo reducido de mujeres y detectar y analizar qué elementos físicos y sociales condicionan la percepción de seguridad de las mujeres que viven en Madre de Dios.
El 7 de julio se programó en la biblioteca Rafael Azcona un taller un barrio para todas las personas, construido por todas, en el que se informó, debatió y la actuación que se desarrolla en el barrio. El 28 de julio se devolvieron las conclusiones de este estudio.
En cuanto a movilidad, se reveló una percepción positiva relacionada con el reparto del espacio público, que favorece la movilidad activa (andando o en bici) frente a la pasiva de las personas (infancia, mayores, diversidad funcional) y se priorizó el bien común a los posibles cambios de rutina personal que las intervenciones suponen.
En la encuesta realizada sobre hábitos de movilidad, el modelo más empleado es el desplazamiento a pie (85%), pero solo la mitad de las personas considera que el diseño de las calles actual (antes de la intervención) está pensado para el mismo.
Respecto al espacio público, se apreció como positiva la nueva configuración del espacio en cuanto al reparto de superficies, valorada como más justa y equitativa. Se dotó al barrio de espacios de relación de los que carecía y que son utilizados de manera continua.
En cuanto a la percepción en materia de seguridad se realiza una buena valoración de la mejoría que han supuesto las intervenciones que han hecho realidad en el barrio las intervenciones de “Logroño Calles Abiertas”; se pudo observar un amplio consenso relativo a este programa, ya se considera que ha supuesto una mejora en la calidad de vida de la ciudadanía, y demandan la consolidación de las actuaciones con acciones encaminadas a la renaturalización de los espacios, la implementación de infraestructuras para la vida cotidiana (bancos, fuentes, sombras...) y la eliminación de las barreras arquitectónicas.
Este proceso participativo fue posible gracias a la ayuda de 11 575 euros concedida al Ayuntamiento de Logroño por la Consejería de Igualdad, Participación y Agenda 2030, destinada a proyectos dirigidos a fomentar y promover la participación ciudadana en las entidades locales.