Hacía tiempo que en la plaza de San Bartolomé no se respiraba un ambiente tan sano. Niños, jóvenes, adultos y mayores habían relevado a los habituales “pobladores” de este magnífico enclave logroñés para asistir a un espectáculo cuanto menos original: la representación de una comedia acerca del sitio que sufrió Logroño a costa de las tropas francesas en 1521.
¡Despierta! Un joven arlequín, cuyo nombre respondía a Revellín, advertía con este grito a pleno pulmón del comienzo de la comedia. Ataviado con colorido vestuario y una máscara en su rostro, se encargó de narrar a los numerosos asistentes cuál era la complicada situación de Logroño a comienzos del siglo XVI: “a los borricos les han salido plumas”, ironizaba en clara referencia a los franceses, que se encontraban muy cerca del lugar, justo “al otro lado del Ebro”.
A partir de este punto se narró la historia de amor y desamor entre un joven francés, François, y una apuesta señorita logroñesa. El Señor Revellín --con una estaca que recordaba a la de Gorgorito--, el Señor Espolón, el capitán Tragacepas o el comandante galo Francesí hicieron las delicias de un público en un primer acto en plena plaza de San Bartolomé.
Poco después de media hora, una nutrida y colorida comitiva recorrió la calle Portales para llegar hasta una también concurrida plaza del Parlamento, donde tendría lugar el segundo acto. Y de ahí vuelta otra vez a San Bartolomé para poner fin a esta interesante comedia.
Sapo Producciones vuelve a representar el domingo la Comedia del Sitio a partir de las 20.00 horas.