Ñoño se gana a Las Gaunas

Desde la marcha de un nueve goleador como Cervero, a la UDL le gusta contar con jugadores que sorprenden y desequilibran desde la segunda línea. Véase Menudo, Pere Milla o Espina, los tres últimos ‘pichichis’. En pretemporada ya apuntó maneras, pero en la victoria contra el Vitoria, por 3-1, se confirmó que Ñoño le da un plus al cuadro riojano. Velocidad, desborde… y gol. No necesitó cuajar un partido completo el cuadro de Sergio Rodríguez para romper a un Vitoria que lo intentó, que salió con la lección aprendida y apretó a una UDL que no estuvo cómoda durante muchos minutos.

En este sentido, si no hay que elaborar y se necesita cambiar el plan, se hace. Sin complejos. Esto es Segunda B y la UDL supo minimizar los riesgos para en vez de jugar en corto y al pie, en largo y al espacio. La intención siempre pasaba por tener el control, combinar por dentro y hacer daño por fuera. Sin embargo, la buena e insistente presión, además de una defensa muy adelantada del Vitoria obligó, más de la cuenta, principalmente a Zubiri, a buscar tanto a Espina como a Marcos André a la espalda de la zaga alavesa. En ese afán se fueron sumando otros compañeros (Caneda, Arnedo, Salvador) para lanzar sobre un Ñoño pegado a la cal que hacía daño escapándose por su perfil zurdo.

Situaciones que dieron su rédito después de un arranque vertiginoso porque tan pronto estaba la UDL despejando balones en el área como Espina asistía para que Ñoño se presentara ante el meta rival aunque sin conseguir batirlo debido al agarrón de Cristian Moreno. Lástima que Muneta marrara la pena máxima con un inocente golpeo que recogió mansamente Quique Cebriá. Todo ello en apenas tres minutos.

El alto ritmo continuó porque el Vitoria no fajaba en su empeño de incomodar la salida de la pelota a los riojanos y de tratar de estar en campo ajeno. El problema era que los envíos de los locales hacían mucho daño a la espalda de una defensa que sufría con esas pelotas diagonales. Tanto que Amelibia veía a los 9 minutos la amarilla, lo cual dejaba a los dos centrales visitantes amonestados. Con el riesgo que eso conlleva.

Fueron entonces minutos en los que la UDL trató de abusar con Ñoño, e incluso Espina que se caía a la banda zurda, para que Cipetic fuera acusando el desgaste hasta el punto de estallar. Lo hizo cuando Salvador metió una diagonal sobre el extremo gaditano, el cual controló de forma magistral para encontrarse delante de Quique Cebría al que superó con maestría picando el cuero.

Un tanto que podía hacer pensar en cierta tranquilidad. Sin embargo, el Vitoria no bajó los brazos y continuó presionando para seguir en campo rival y no permitir que los blanquirrojos tuviera el balón como les hubiera gustado. Hasta el descanso Fran Pastor, que volvía a Las Gaunas igual que Amelibia, intentó animar la contienda con varias conducciones peligrosas, aunque sin consecuencias, como los tiros lejanos de un Vitoria al que le costaba generar peligro. Su mejor oportunidad fue un barullo tras un saque de banda y un tiro cruzado de Alain que se marchó fuera.

En la otra parte del campo, hacía falta poco para ver disfrutar a Ñoño. El andaluz tiene chispa, desequlibrio y, además, suma goles. Cuando recibe ya sabe lo que va a suceder. Si puede encara. No lo hace para escaparse de su par porque sí. Busca que sucedan cosas. Si se mete en el área... peligro. Eso hizo en la jugada que cerró el primer tiempo. Condujo desde la banda hasta el interior del área, siempre generándose ese espacio para poder tirar. Cuando consideró oportuno, zarpazo: golpeo con el interior al palo contrario. Imposible de detener. A vestuarios y prácticamente a pensar en el choque del miércoles de Copa del Rey ante el Avilés.

CONTINUIDAD TRAS EL DESCANSO

Evidentemente restaban 45 minutos y Ñoño los aprovechó para romper cinturas con el balón pegado a los pies, para provocar una falta que acabó en gol de Marcos André y para soñar con un debut en Las Gaunas soñado con tres tantos en su casillero. Pudo hacerlo en dos oportunidades, pero en la primera venía de pegarse una carrera de treinta metros y no se creyó el tiro, mientras que en la segunda, tras un penalti que le hicieron a él mismo, se chocó con el larguero.

Aprovechó el Vitoria, con el 3-0, para maquillar el marcador. Lo pudo hacer desde las esquina, con varios córners seguidos que mantuvieron en vilo al aficionado riojano. Julen Azkue lo rozó con un remate al larguero ante el único debe que dejó el conjunto logroñés sobre el césped de Las Gaunas, las acciones defensivas a balón parado. Cierto que también los de Sergio Rodríguez, a la contra y con espacios, gozaron de varias opciones de ampliar la renta.

La más clara vino tras una brillante acción individual de Salvador que finalmente cedió para que Espina, algo escorado, batiera al Quique Cebriá. Su rechace lo recogió Germán Sáenz, cuyo centro chut le vino a Rayco -otros dos que se estrenaban en casa- que con la portería vacía mandó a la grada. Ramiro debutaba como lateral diestro a falta de diez minutos y Julen Azkue se sacó el mal sabor de boca del poste anterior rematando tras un córner y superando a Miguel para dejar un 3-1 que deja a la UDL con dos victorias después de dos jornadas. Con paso firme, brillando en Lezama y superando a un Vitoria incómodo gracias, en parte, al desequilibrio que aporta uno de los puntales de los blanquirrojos, Ñoño, autor de dos goles y que provocó dos penaltis y la falta que acabó en el tanto de Marcos André, que se reivindicó como '9' en un choque con mucho trabajo y poca lucidez personal.

FICHA TÉCNICA

UD Logroñés: Miguel; Miguel Santos, Caneda, Zubiri, Paredes; Muneta, Arnedo, Salvador, Ñoño (Germán Sáenz, min. 70); Espina (Ramiro, min. 80) y Marcos André (Rayco, min. 65).

Vitoria: Quique Cebriá; Cipetic (Ibargoien, min. 46), Amelibia, Cristian Moreno (Ajuriagoikoa, min. 46), Julen López; Ángel López, Sarriegi, Julen Azkue, Fran Pastor; Koldo Obieta y Alain Ribeiro (Alfonso, min. 63).

Goles: 1-0, min. 22: Ñoño. 2-0, min. 45: Ñoño. 3-0, min. 53: Marcos André. 3-1, min. 84: Julen Azkue.

Árbitro: David Recio Moreno (Colegio Navarro). Amonestó a los locales Arnedo (min. 34) y Paredes (min. 35) y a los visitantes Cristian Moreno (min. 2), Amelibia (min. 9), Sarriegi (min. 24) y Julen López (min. 39).

Incidencias: 2.480 espectadores en Las Gaunas, según informó el club organizador. Por problemas técnicos no hubo megafonía.