La presión sindical y el anuncio de movilizaciones ha conseguido que siete residencias y cetros de día de los que se denunció incumplimientos de los salarios firmen un acuerdo paran abonar los atrasos que adeudan este año con su plantilla, cantidad que asciende a 500 euros de media. Se han comprometido por escrito a incrementar los salarios de las trabajadoras un 3,1%, porcentaje correspondiente al IPC de 2023 y que obligaba a las empresas a actualizar las nóminas desde enero de 2024.
Inicialmente se habían convocado paros hasta en 7 centros de trabajo, pero las empresas Bouco, GSR (Gestión de Servicios Residenciales), la residencia El Sol y el grupo Emera accedieron a pagar esos atrasos. Por ello, la única concentración prevista era la que se iba a celebrar en el Centro de Día de Manzanera, gestionada por la empresa Arquisocial. Tan sólo una hora antes de la concentración, a las 11 horas, han comunicado a las organizaciones sindicales su intención de pagar estas cantidades.
Los sindicatos con presencia en la mesa negociadora del IV Convenio Regional de Residencias y Centros de Día de La Rioja, CCOO, CSIF, UGT y USO, han explicado que “el principal objetivo de las movilizaciones se ha conseguido”. La secretaria general de la federación de Sanidad y Sectores Sociosanitarios de CCOO La Rioja, Carmen Martínez, ha señalado que “se ha trabajado todo el año por intentar llegar a un acuerdo y no ha habido manera”, pero lo que las organizaciones sindicales apostaron por llevar a cabo estas movilizaciones en los centros de trabajo. Además, ha recordado que este convenio afecta a más de 2.500 personas en la región.
Por su parte, la secretaria del sector Sociosanitario de UGT Servicios Públicos, Dari Saiz, ha subrayado que sigue habiendo centros que no están pagando la subida salarial correspondiente a 2023 y tampoco han pagado los atrasos. “Posiblemente nos tengamos que volver a concentrar en unidad sindical en algunos de estos centros”, ha anunciado Saiz, quien ha criticado a la Patronal por “pretender exprimir hasta el último minuto a las trabajadoras”. Por último, el representante de USO, Jesús Fernández, ha remarcado que es un día “agridulce”. “Estamos contentos y satisfechos de que se pague lo que ya se debe, pero también denunciamos que la mayoría de las trabajadoras están cobrando el salario mínimo interprofesional y no se corresponde con las funciones y las responsabilidades que se tiene”.