El próximo viernes llega a los cines uno de los estrenos más esperados del año, Ágora, la nueva película de Alejandro Amenábar. Protagonizada por Rachel Weisz, en su primera película tras hacerse con el Óscar Amebábar relata la historia de la filósofa, astrónoma y matemática Hipatia, “una mujer fuerte, de espíritu moderado”, que brilló por su inteligencia en la Alejandría del siglo IV. No podía haber mejor marco para presentar Ágora, que muestra la destrucción de la legendaria Biblioteca de Alejandría, que la Biblioteca Nacional. El acto, que contó con la presencia de su directora, Milagros del Corral, tuvo lugar en una de sus salas. Allí, el director de Mar adentro, Los otros, Abre los ojos y Tesis repasó los pormenores de esta producción, que ha contado con un presupuesto de 50 millones de euros.
“Siempre he dormido como un bebé, porque no suelo estar nervioso ante los estrenos, pero anoche no concilié el sueño”, confesó Amenábar, quien no obstante se enfrenta con tranquilidad a la premier de esta noche en los cines Kinépolis (a la que están invitados unas 4.000 personas, según fuentes de Telecinco Cinema -que participa con un 85% en la producción del filme-).
Amenábar (que de nuevo firma el guión junto a Mateo Gil) consideró que ya está todo hecho y que, ahora, sólo queda que el viernes se estrene a nivel comercial y que guste al público. “A partir del día 9 será la gente quien diga si le interesa Ágora o no”, dijo el realizador, detallando que su último filme cuenta “la historia de una mujer atea, que se negó a ser bautizada y murió a manos de unos fanáticos”.COMO RAMÓN SAMPEDRO
“En Hipatia, como me pasó con Ramón Sampedro (protagonista de Mar adentro), he intentado mostrar su personalidad. Fue una mujer fuerte de espíritu moderado”, consideró el realizador, que ha intentado denunciar en Ágora “a la gente que deja de contrastar sus ideas, ha dejado de dialogar, y recurre al palo... Algo que sigue pasando hoy”.
La película, con la que Amenábar ha querido “mirar a atrás, a las películas antiguas de romanos”, está ambientada en Alejandría, en el siglo IV. En ella, el director ha querido que el espectador “sienta y huela una civilización remota como su propia realidad”, y ha mostrado las violentas revueltas religiosas y el ascenso del cristianismo.
Ante la destrucción de su Biblioteca, la brillante astrónoma Hipatia (Rachel Weisz) lucha por salvar las sabiduría del Mundo Antiguo. Dos de sus discípulos, que además se disputan su corazón, le acompañaran en este viaje: Orestes (Isaac) y el joven esclavo Davos (Minghella).LOS SECRETOS DEL UNIVERSO
Amenábar, interesado por la Ciencia y por desentrañar los secretos del Universo, ha invertido cuatro años en esta producción, su quinta película tras Mar adentro, Oscar de la Academia de Hollywood. En ella ha sumado al ocaso del Imperio Romano, con su cultura grecolatina, la cultura egipcia.
“En mis películas siempre hay un halo de esperanza, aunque haya finales oscuros”, detalló, agregando que, pese a que actualmente vivimos un tiempo de cambios e incertidumbre, la crisis no tiene por qué ser un paso atrás. “Cualquier tiempo pasado fue peor”, consideró.
Rodada en inglés, “el latín del siglo XX”, por motivos económicos y para ser más rentable en la taquilla anglosajona, Amenábar justificó no haberla rodado en copto, latín y griego porque en su historia no ocurría como en La Pasión de Mel Gibson. “Fue muy inteligente rodarla en arameo, pero es una historia que todos conocemos”, consideró.
Amenábar, que dijo haber evolucionado desde la fe católica en la que se crió hasta el agnosticismo, confesó ser ahora ateo, como su protagonista. “Si creo en algo mayor, es en la naturaleza”, aseveró, sin tratar de imponer sus ideas a nadie.
Para dar vida a Hipatia, la actriz inglesa Rachel Weisz (de la que Amenábar dijo que tiene “luz y talento”) tuvo que documentarse y aprender lo mínimo de Ciencia. “Tenía que ser creíble, que sabía de lo que hablaba”, afirmó Weisz, Oscar a la Mejor Actriz por El jardinero fiel.