La Sección Sindical de la Federación de Empleadas y Empleados de UGT (FeSP-UGT) de La Rioja del Ayuntamiento de Logroño solicitó el pasado 19 de marzo al equipo de gobierno del consistorio que se hiciera el test de diagnóstico del COVID-19 a la policía local, no habiendo obtenido aún ninguna respuesta.
El plan de contingencia establecido en la Policía Local de Logroño ha supuesto una reorganización de calendarios y horarios de los agentes, buscando el cumplimiento de un servicio efectivo y tratando de minimizar las posibilidades de contagio entre los mismos.
Por ello, se han creado grupos de trabajo “estancos”, de modo que si un miembro de los mismos se contagia, transmitiría la enfermedad, como mucho, a los demás miembros de su grupo, garantizando la salud del resto de agentes.
Igualmente, se han aumentado las jornadas diarias a 12 horas durante los 7 días de trabajo continuo, generando grupos de trabajo no expuestos al virus directamente en la calle, y asegurando con ello el servicio policial durante mucho más tiempo.
UGT aplaude las medidas establecidas, así como la decisión de tomarlas incluso antes de decretarse el estado de alarma, en previsión de la situación que llegó más tarde.
No obstante, FeSP-UGT cree imprescindible realizar el test de diagnóstico del virus al grupo de agentes que inician la semana de trabajo, pues pueden incorporarse a sus puestos contagiados tras sus días de confinamiento, exponiendo así desde el primer día y a lo largo de la semana de trabajo al resto de agentes y a toda la ciudadanía.
Hay que garantizar la salud del mayor número de trabajadores que integran los servicios básicos durante el mayor tiempo posible, y es imprescindible mantener operativo al colectivo de Policía Local.
Igualmente, quiere agradecer el esfuerzo, compromiso y dedicación mostrado por el colectivo de Policía Local de Logroño durante estos difíciles días.