El Ayuntamiento de Madrid está estudiando un nuevo proceso de nulidad de venta de las viviendas sociales al fondo Fidere tras la sentencia del Tribunal de Cuentas que condena a la exalcaldesa de la capital Ana Botella y a siete cargos de su Gobierno municipal a pagar 25,7 millones de euros por esta enajenación de pisos sociales a fondos buitre.
El Gobierno municipal de Manuela Carmena estudia además recurrir la sentencia. Según ha explicado la primera teniente de alcalde, Marta Higueras, también presidenta de la Empresa Municipal de la Vivienda y Suelo (EMVS), el Consistorio valora el perjuicio económico a las arcas municipales en 127 millones de euros, un importe muy superior al que estima el Tribunal de Cuentas en su sentencia.
Higueras ha explicado que cuando el Ayuntamiento a través de la EMVS presentó la demanda estimó el quebranto patrimonial en 127 millones de euros por lo que considera que el importe de la sentencia se queda corto. La primera teniente de alcalde ha asegurado además que el Gobierno municipal valora iniciar un nuevo proceso de nulidad de venta para tratar de revertirlo tras la condena del Tribunal de Cuentas.
El procedimiento anterior fue archivado “por el informe preceptivo de la Comunidad, que fue negativo”, escenario que ahora cambia con el escrito del Tribunal de Cuentas, entiende Higueras.