El Banco de España ha confirmado este jueves los datos que ya adelantó el Ayuntamiento de Madrid el pasado mes de abril: Carmena ha reducido la deuda en el primer trimestre del año en 257 millones de euros. Esto supone que Consistorio tiene 2.000 millones menos de endeudamiento desde la llegada del Gobierno de Ahora Madrid, hace ahora dos años, cuando la deuda era de 5.637 millones de euros.
Al cierre del primer trimestre del año, la deuda de la capital se sitúa en los 3.611 millones de euros, según los datos difundidos por el Banco de España. Madrid lidera la reducción de la deuda. Teniendo en cuenta la cifra del primer trimestre de 2016, la deuda ha bajado en 1.118 millones de euros en un año.
Desde la llegada del equipo de Manuela Carmena al Consistorio, en junio de 2015, se ha reducido la deuda un 36,3% existente a esa fecha. Estos datos superan ya en más de 100 millones los dejó presupuestados el Gobierno Ana Botella para el cierre de 2018. La planificación del anterior ejecutivo era acabar 2016 con 4.729 millones de deuda; 2017, con 4.212, y 2018, con 3723.
Las previsiones del Gobierno de Manuela Carmena es acabar la legislatura dejando la deuda a la mitad de la que se encontraron y están a menos de 1.000 millones de conseguirlo con dos años todavía por delante.
A pesar de los buenos datos de amortización de la deuda la relación con Hacienda no es muy alentadora. El enfrentamiento entre el ministro Cristóbal Montoto y el consistorio por la interpretación de la regla de gasto se encuentra en estos momentos en los juzgados de lo contencioso-administrativo del Tribunal Superior de Justicia de Madrid, tras ser admitido a trámite el recurso presentado por Sánchez Mato contra las exigencias de Montoro.
Para Hacienda, la corporación local ha incumplido durante dos años la Ley de Estabilidad Presupuestaria, que obliga a las administraciones con superávit a no gastarlo y destinarlo a amortizar deuda. Al contrario el presupuesto del consistorio, que cerró el año con 1.1.00 millones de superávit ha aumentado este ejercicio. Montoro exige ahora recortes de más de 200 millones, pese a ser uno de los municipios que más ha ayudado a cuadrar las cuentas del Gobierno de Rajoy.