La Vila Joiosa nombra a dedo dos inspectores de la policía suspendidos en la oposición, uno de ellos con un 1,4 de nota
El gobierno local de la Vila Joiosa ha convertido el nombramiento de dos inspectores de la Policía Local en un embrollo que puede conllevar consecuencias jurídicas, además el malestar que han generado entre la plantilla del cuerpo policial vilero.
Todo comenzó con unas oposiciones para cubrir ambas plazas que el Ayuntamiento resolvió a principio de 2023. Consistían en seis pruebas: físicas, un psicotécnico, un examen tipo test, resolver un caso práctico, la valoración de la titulación de valenciano y un concurso de méritos.
La suma de las seis calificaciones configuraba la nota final y de los 60 opositores que se presentaron a las oposiciones, solo aprobaron dos. Los inspectores ahora nombrados discrecionalmente por el alcalde de la localidad, Marcos Zaragoza, del PP, suspendieron. En el examen tipo test, uno de ellos (M.A.P.G.) obtuvo una nota de 4,6 y el otro (J.J.L.D.) de 1,4.
Finalmente, las dos primeras notas en el test fueron un 8 y un 7,66 y ambos aspirantes también fueron los únicos que aprobaron la oposición, así que fueron propuestos por el tribunal para ocupar sendas plazas de inspector de la Policía Local.
Sin embargo, tras ese proceso de oposiciones, una de las plazas acabó judicializada y está pendiente de sentencia firme, por lo que solo fue ocupada la otra, aunque finalmente también quedó vacante por cuanto quien la consiguió ha acabado liberado por un sindicato.
Con ambas plazas por cubrir, finalmente el 25 de noviembre de este año sendas resoluciones nombraron inspectores a dedo a los dos oficiales que habían suspendido en el proceso opositor, y ambas están encabezadas por la siguiente frase: “Vista la propuesta del Sr. Alcalde Presidente de este Ayuntamiento, y del Comisario Jefe de la Policía Local (…)”. Es decir, que ambos nombramientos fueron propuestos por el primer edil.
El despropósito se consuma con posterioridad a los nombramientos a dedo de estos dos inspectores durante un año con fecha 3 de diciembre del presente, cuando el alcalde firmó y publicó las “bases específicas rectoras para las pruebas selectivas que han de regir una bolsa de empleo temporal de dos plazas de inspector de la Policía Local promoción interna ordinaria, por el sistema de mejora de empleo”. O sea, que primero promocionó a dedo como inspectores a dos oficiales y ocho días después convocó la bolsa de empleo, lo que, según fuentes jurídicas consultadas por este periódico, podría conllevar consecuencias judiciales, por cuanto restringiría o limitaría derechos básicos del resto de oficiales.
Se da además la circunstancia de que uno de los dos oficiales nombrado a dedo acabó llevando al juzgado el supuesto práctico de las oposiciones a las que se presentó y suspendió para reclamar su nulidad. Sin embargo, tanto el juzgado de lo contencioso-administrativo número 4 de Alicante en primera instancia, como posteriormente el TSJ, al que recurrió, desestimaron sus pretensiones y dieron la razón al tribunal opositor.
Esta situación ha generado, además, un profundo malestar en la plantilla de la Policía Local, según las fuentes consultadas por este periódico, en la que solo uno de los seis inspectores ha conseguido la plaza por oposición. En total, la plantilla de la Policía Local de la Vila Joiosa está formada por unos 55 efectivos.
Este periódico ha contactado con el alcalde Marcos Zaragoza para preguntarle sobre los nombramientos y la creación de la bolsa de trabajo, pero no ha querido dar ninguna explicación.
25