El tercer presidente de la Comunidad de Madrid celebra la “estabilidad” en la legislatura más convulsa para el PP
Un canto a la “estabilidad” de la Comunidad de Madrid en el epílogo de la legislatura más convulsa. Tras una dimisión traumática, la de Cristina Cifuentes; y la huída inesperada de Ángel Garrido a Ciudadanos cuatro días antes del 28A, el tercer presidente regional, Pedro Rollán, ha celebrado la “consolidación” de la institución “con independencia de aquellos a quienes en un momento u otro nos cabe la responsabilidad de desempeñar la Presidencia”.
En el auditorio estaba toda la política madrileña. La organización ha tenido que acomodar a más de 1.000 personas en plena resaca electoral. El expresidente Garrido se ha sentado al lado de Esperanza Aguirre, que ha vuelto tras dos años de ausencias para apoyar al líder Pablo Casado después del batacazo del domingo. Pero le ha dejado algún encargo: “Ha intentado dar una patada a Abascal pero en mi trasero”.
El líder del Gobierno regional hasta hace cuatro días también ha puesto calificativos al nuevo viaje al centro del PP mientras se paseaba entre sus excompañeros en su antigua casa: “Es una operación cosmética que nadie se va a creer”. A pocos metros estaba Pablo Casado, que ha pasado por delante de él sin inmutarse y después ha fundido en besos y abrazos a los suyos. Después ha justificado que no le había visto.
Los candidatos de Vox han escuchado el discurso in situ por primera vez, aunque ningún asistente les hacía mucho caso. El Gobierno regional les ha sentado al lado de Inigo Errejón, candidato de Más Madrid, y de Carlos Sánchez Mato, aspirante de IU a alcaldía de Madrid.
Pedro Rollán, en su papel de anfitrión, ha seguido el guion al milímetro. “La Administración regional trabaja todos los días para dar respuesta a las necesidades y expectativas de la ciudadanía”, ha defendido el presidente, que ha enmarcado el tercer recambio, el suyo, como garantía de “la normal continuidad entre mandatos” y ha defendido el “autogobierno” de la Comunidad de Madrid, frente a sus aliados en Andalucía de Vox que piden el fin de las comunidades autonómicas.
Fundido en la “normalidad”, Rollán ha hecho “protagonistas” a los madrileños en medio del morbo que despierta cada año el evento. La entrega de medallas ha quedado marcada por la ausencia de mujeres entre las premiadas con el distintivo de oro. Estos premios han ido a parar al cantante Raphael, a Gregorio Marañón y Bertrán (actual presidente del Patronato del Teatro Real de Madrid) y, a título póstumo, a Ignacio Echevarría, fallecido en el atentado de Londres de junio de 2017. Sí ha habido medallas, pero de plata, para figuras femeninas. Entre ellas, la federación sub 17 de fútbol femenino, que han venido acompañadas por la exjefa de Comunicación de Cifuentes, que ahora dirige la prensa de la Federación Española de Fútbol.
