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Opinión - Cada día un Vietnam. Por Esther Palomera

Cabalgatas vecinales de Reyes en Fuencarral y Villaverde como respuesta al sucedáneo del Ayuntamiento de Madrid

Este año todos los distritos de la capital tendrán cabalgata de Reyes. A diferencia de lo ocurrido en Navidades anteriores, Melchor, Gaspar y Baltasar podrán llegar a los niños de toda la ciudad entre el 3 y el 5 de enero. El Ayuntamiento se las ha ingeniado para conseguir que no haya ninguna zona sin cabalgata, aunque las diferencias son bastante claras entre unos distritos y otros. 

Ante la negativa de años anteriores, son varios los barrios y asociaciones vecinales que han convertido en una tradición organizar sus propios programas de actividades navideñas. El barrio de Butarque en Villaverde y el de Peñagrande en Fuencarral son un ejemplo de ello. Este año han sido sorprendidos con cabalgatas municipales en sus distritos, pero no existe nada que celebrar al respecto. 

La programación navideña del Ayuntamiento viene con letra pequeña y los vecinos se niegan a que recorten la ilusión de los más pequeños de una forma que roza la ilegalidad. Por esta razón han decidido “volver al origen”, a la organización ciudadana y a las cabalgatas populares. Modestas, pero también honestas, con la ayuda de todos los vecinos han decidido hacer las cosas al margen del Ayuntamiento con la intención de recuperar la magia de la Navidad y la dignidad de sus barrios. 

La Asociación Vecinal Independiente de Butarque denuncia que desde el Ayuntamiento “han manipulado para salir del paso”, y como consecuencia, “han dejado a los que tradicionalmente hacían la cabalgata popular con las migajas”. Esto no queda ahí. Los vecinos de este barrio de Villaverde se han puesto en manos de abogados, pues consideran una “tomadura de pelo y una ilegalidad terrible” la actuación del Ayuntamiento y de la Junta de Distrito respecto a la organización de la cabalgata. 

El caso de los vecinos de Peñagrande es similar, tras dos años sin cabalgata en su distrito no esperaban estar esta Navidad entre los planes del Ayuntamiento. “Han montado algo paralelo, una especie de espectáculo, un despropósito para no tener que contar con los vecinos”, explica el vicepresidente de la Asociación Vecinal Islas de Peñagrande, Víctor de Elena. Manteniéndose en la misma línea que en Navidades pasadas, han decidido obviar los planes del concejal de distrito de Fuencarral, Javier Ramírez Caro, y montar su propia programación navideña, en la que además del recibimiento de los Reyes Magos se incluyen conciertos, deporte y hasta un concurso de dibujo.

El barrio levanta al barrio una vez más y a pesar de contar con pocos recursos, los vecinos de Peñagrande han conseguido progresar cada año en su oferta de actividades de Navidad. Lo más admirable de su actuación es que todo es autofinanciado por las cuotas de los socios. Además, este año cuentan con la colaboración de tres comercios, el centro comercial La Vaguada, los multicines Odeón de Tres Cantos y el autocine Madrid Fever. Gracias a la colaboración de estas empresas han podido ofrecer mejores premios para su concurso de dibujo

Nadie les ha regalado nada. De hecho, el vicepresidente de la asociación asegura que desde que entró Ramírez como concejal no han obtenido ninguna subvención, “no lo entendemos, presentamos la misma programación siempre, es su criterio el que nos deja fuera respecto a otras asociaciones”. Desde 2017, año en el que se fundó esta asociación, han subsistido de la autofinanciación y de la motivación de los vecinos del barrio, que son los que les animan a seguir con su labor. 

Una lucha legal entre los vecinos y el Ayuntamiento

En Butarque viven una historia casi paralela. “Llevamos preparando nuestra propia cabalgata desde 2012 porque aquí nunca ha habido, es un barrio de nueva creación y siempre nos han dejado al margen”, explica una portavoz de la asociación. Con las donaciones y la colaboración del barrio pudieron llevar una pizca de magia a los más pequeños en un día tan especial. Algunos comercios se unieron a su labor y con la llegada al Ayuntamiento de Manuela Carmena consiguieron firmar un convenio junto al resto de entidades vecinales de la zona oeste de Villaverde. 

Consiguieron una subvención y durante cuatro años se dinamizaron las actividades de todo el año de tres barrios con el dinero recibido. Cuando Manuela Carmena cesa su alcaldía se suprime el convenio. “Dicen que hay una falta de transparencia y que no está todo publicado, pero no es verdad. Hemos publicado todas las facturas y demostrado hasta el último céntimo de todo el dinero que nos ha dado el Ayuntamiento”, señalan los vecinos. “Estamos muy enfadados con ellos porque han vertido una serie de acusaciones sobre las asociaciones vecinales que no hacen más que alimentar la leyenda de los chiringuitos”, añaden. 

Este año, la Junta de Distrito de Villaverde sorprendió a los vecinos con la noticia de que habría una cabalgata que pasaría por todos los barrios del distrito. Ocho kilómetros de pasacalles que los vecinos consideran “inaguantables”. Con la intención de favorecer a todas las zonas de Villaverde, desde el Ayuntamiento intentaron gestionar con la empresa licitadora de la cabalgata un recorrido que cruzase desde Villaverde Alto hasta Villaverde Bajo, pero no ha sido así. “Han modificado todo el recorrido y no va a pasar ni por San Cristóbal, ni por la calle Berrocal de Butarque que es la zona comercial del barrio”, explica la portavoz vecinal.

Como respuesta a este “vacile” los vecinos de Butarque, al igual que los de Peñagrande, vuelven al espíritu de la cabalgata popular. Con un pasacalles propio que legalmente será considerado una protesta, los niños del barrio podrán ver a los Reyes Magos sin tener que desplazarse a otras zonas el próximo 5 de enero a partir de las 18.30 en la calle Diamante. “No vamos a dejar a nuestros hijos sin cabalgata en un barrio en el que más de un tercio de la población tiene menos de 15 años”, sentencian los vecinos de Butarque. La ilusión no es recortable.