La incertidumbre de cara a las elecciones regionales del 4-M en Madrid es máxima: nunca antes se votó en un día laborable (martes) después de una ruptura en el gobierno, a mitad de legislatura y con mascarilla por la pandemia. Los resultados son muy difíciles de anticipar, pero queremos fijarnos en la última vez que se abrieron las urnas en la región, el 10 de noviembre de 2019, para la repetición de las elecciones generales.
Aquellos comicios tenían ciertas similitudes con los próximos de mayo, que se han presentado como una batalla ideológica, de enfrentamiento de bloques izquierda-derecha ante un posible hundimiento del partido de centro (Ciudadanos). Los partidos políticos que concurren son idénticos (ya estaba entonces Más País) e incluso uno de los candidatos, Pablo Iglesias, repite en ambas convocatorias.
A nivel regional, aquellas elecciones las ganó el PSOE de Pedro Sánchez con el 26,66% de los votos, mientras que el PP de Pablo Casado se quedó en el 24,72%. Pese a la victoria socialista, la izquierda (entendida como la suma de PSOE + Unidas Podemos + Más País) se quedó en el 45,16% de los sufragios frente al 51,9% de las papeletas que consiguió el bloque de PP + Vox + Ciudadanos. Todos los partidos consiguieron más del 5% de los votos y Albert Rivera, que por entonces era candidato, llegó a casi el 9%.
Si bajamos al nivel de ciudad, el PP sí que consiguió más votos en Madrid capital, con el 27,3% del total, frente a los 26,25% cosechados por el PSOE y con Vox como tercera fuerza.
En el distrito de Chamberí, aquellas elecciones de 2019 fueron mayoritariamente para la derecha, como tradicionalmente ha sucedido durante los últimos años en esta parte de Madrid. El partido más votado fue el PP, con el 37,01% de los votos, seguido a gran distancia del PSOE (19,2%). El bloque de derechas obtuvo mejores resultados gracias a la fuerte implantación de Vox en la zona, con el 17,51% de los sufragios y un importante granero de votos tanto en el barrio de Almagro como en la sección electoral de Vallehermoso que coincide con las casas cuartel de la Guardia Civil. Allí fue el partido más votado e incluso se impuso al PP.
El resto de formaciones políticas cosecharon resultados más modestos, inferiores al 10%: fue el caso de Ciudadanos (9,64%), Podemos (8,76%) y Más País (6,1%). El bloque de derechas (uniendo las papeletas de PP, Vox y Ciudadanos) sumó 64,16% frente a los de izquierdas, que se quedó casi en la mitad, con el 34,06%.
El siguiente mapa de distribución de votos entre bloques deja claros los caladeros de voto de la derecha, con amplio dominio en los barrios de Vallehermoso, Almagro y Ríos Rosas. Las zonas con mayor igualdad entre bloques fue por un lado el barrio de Trafalgar y parte de Arapiles. Puedes consultar todos los datos con detalle aquí.
Es también interesante comprobar cuál fue el primer partido político en cada mesa electoral (gráfico superior) y cuál fue el segundo (debajo). El PP fue mayoritario en la mayor parte del distrito -salvo alguna manzana socialista y la citada de Vox- mientras que los de Santiago Abascal eran segundos en los barrios donde también triunfaba el PP, mientras que los de Pedro Sánchez dominaba en amplias zonas del interior del distrito.