La Plaza Mayor y sus más de 400 años de historia se convierten en exposición en el Museo de Historia de Madrid. Una muestra de más de 300 piezas que se podrá visitar hasta noviembre y incluye desde cuadros, dibujos, estampas, fotografías, postales y maquetas hasta otros objetos originales con los que podemos conocer los cuatro siglos de existencia de este emblemático enclave de la ciudad.
Bajo el título “La Plaza Mayor - Retrato y Mascara de Madrid”, es la primera gran exposición que se realiza sobre la Plaza Mayor y es una las actividades estrella que conmemoran su IV Centenario, pues permite ser partícipe de los múltiples uso que este espacio ha tenido a lo largo de la historia de Madrid.
Gracias a fondos aportados por la Biblioteca Nacional, el Archivo Histórico Nacional o la Pinacoteca de Caserta y del propio Ayuntamiento de Madrid, asistiremos a la evolución de la obra de Juan Gómez de Mora, que entre 1617 y 1622 diseñó este armonioso recinto rectangular encerrando un enorme vacío que ha sido testigo de multitud de festejos, populares y cortesanos, profanos y religiosos, pero también de la vida tradicional y cotidiana, que se convirtió en el rototipo de las Plazas Mayores españolas y de muchas de Latinoamérica.
Sala de exposiciones temporales
La sala dedicada a exposiciones temporales del museo acogerá una parte de la muestra articulada en seis secciones cronológicas que abarcan varias áreas temáticas:
La plaza abierta (1617-1790)
- Casa de la Panadería
- Mercado urbano
- La plaza en fiestas
La plaza cerrada (1790-1846)
- El incendio de 1790
- La reforma de Juan de Villanueva
- Adiós a la tauromaquia
- La plaza jardín (1843-1936)
- Una imagen de postal
- Otros usos, nuevas propuestas (1920-2017)
Destacan entre todos los elementos expuestos varias obras del propio Museo de Historia de Madrid, como las vistas más antiguas de la plaza con los cuadros de Juan de la Corte Fiesta en la plaza Mayor de Madrid (de 1630) o el anónimo Perspectiva de la plaza Mayor (1634, aproximadamente), junto a diversas estampas que representan un auto de fe o el incendio de 1790, además de fotografías y postales de una ajardinada Plaza Mayor durante el siglo XIX.
En cuanto a los fondos museísticos cedidos temporalmente de visita imprescindible, la vista pintada por Antonio Joli hacia 1750 representado la plaza en día de mercado, cedida por la Pinacoteca de Caserta; los dibujos de Juan de Villanueva con los proyectos de reconstrucción de la plaza tras el incendio, provenientes de la Biblioteca Nacional; o una serie de esculturas taurinas del Museo de Valladolid junto a los dibujos de las Casas de la Panadería y Carnicería y las tarascas que ha aportado el Archivo de Villa.
Patio de acogida
Ya en el patio de acogida del Museo de Historia, una Plaza Mayor más contemporánea, con reproducciones fotográficas de carteles, fotografías, impresos, fotogramas del NO-DO, además de una maqueta que muestra la plaza en los años 60 del siglo XX:
- La plaza jardín (1843-1936)
- Repensando la plaza (1920-1936)
- La plaza desarmada (1936-1939)
- La plaza en gris (1939-1961)
- Reinventando la plaza (1961-1969)
- La plaza de hoy (1970-2018)