Íñigo Méndez de Vigo es, además del Ministro de Educación, Cultura y Deporte y portavoz del Gobierno, un gran amante de la gastronomía y auténtico embajador de Chueca y Salesas. Hace unos días estuvo enseñando a un periodista del diario ABC sus lugares favoritos para tapear.
Cerca de la Gran Vía, Méndez de Vigo se decanta por el Mercado de la Reina (C/Gran Vía, 12), un local con ya una década de antigüedad que también tiene entrada por la calle Reina donde le gusta tomar una copa o comer en las mesas altas o bajas del restaurante, pues abre desde el desayuno hasta las 2:00 de la madrugada. Muy cerca de allí está el histórico Museo Chicote, de los mismos dueños, donde además de cócteles es puede picotear algo.
La siguiente parada de la ruta es Bocaíto (C/ Libertad, 6), un bar típicamente andaluz que reivindica haber implantado en Madrid el término de «tosta». Méndez de Vigo confiesa su predilección por la tosta de paté de bacalao con caviar o la tosta de gambas, que él acompaña con fino.
Desde allí una nueva parada en el Mercado de San Antón (C/ Augusto Figueroa, 24). Concretamente en «La Charcutería de Octavio» y en su «Trastienda», para probar sus ostras de belón, diversos quesos y jamón, todo ello regado con un Ribera de Duero blanco.
Como punto de destino final, Arce (C/ Augusto Figueroa, 32), el restaurante de Iñaki Camba, que aunque no es un lugar de tapeo propiamente dicho, sí que es para el Ministro uno de los templos gastronómicos de obligada parada para los paladares más exigentes. Allí Méndez de Vigo se decanta por una liebre y un Ribera de Duero con los que da por concluida esta ruta de cultura culinaria.
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