Miles de personas acudían ayer sábado a la Gran Vía madrileña para manifestarse a favor de la continuidad de Madrid Central. Una movilización que llega justo antes de la moratoria de multas aprobada por el nuevo gobierno municipal y que dejará en la práctica sin efecto esta zona de bajas emisiones.
Tal fue la afluencia de personas en apoyo de Madrid Central que la calzada por la que cada día circulan los coches se quedó pequeña y ocuparon también las aceras en su marcha desde Callao hasta Cibeles.
Al llegar a la confluencia con Gran Vía con Alcalá los manifestantes ocuparon tanto los carriles de subida como los de bajada con sus pancartas y mensajes de “Yo sí quiero Madrid Central” y “Gobierne quien gobierne, Madrid Central se defiende”.
Además de lemas medioambientales y relacionados con la necesidad de tener una buena calidad del aire, también había otros que apelaban de manera directa al alcalde de la ciudad, José Luis Martínez-Almeida, y a sus socios al frente de la aldaldía: “El coche, mata. Almeida remata. Menos coches = menos R.I.P.”, “Céntrate, Almeida”, “Respirar también es de derechas”, “Trifachito: con la salud no se juega” o los textos “Warning: toxic love” y “Mal Madrid” junto al rostro de los representantes de PP, Ciudadanos y Vox.
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