El reordenamiento del tráfico por unas obras de Metro de Madrid en la estación de Avenida de América se llevará por delante 18 árboles -15 talados, varios de ellos de gran porte, y 3 trasplantes- en el final de la calle María de Molina, denuncian los vecinos de la zona y ha podido comprobar in situ este periódico.
Varios ejemplares de plátanos de sombra y de aligustres del Japón han desaparecido en los últimos días bajo la motosierra de los operarios de Dragados y Geocisa, las empresas adjudicatarias de los trabajos, obra de la Comunidad de Madrid. El motivo son las obras para instalar hasta diez ascensores en la estación de Avenida de América, que durarán tres años y costarán más de 43 millones de euros.
La Comunidad de Madrid explica que la ubicación de los árboles impedía ejecutar las obras manteniendo su posición. Por ello han sido retirados de momento 11 ejemplares -explica a Somos Madrid una portavoz de la Consejería de Transportes- mientras que otros tres serán talados en las próximas fechas y tres más trasplantados. El Ayuntamiento de Madrid eleva 15 el número total de talas, incluyendo la actuación que se extiende a la calle Pedro Valdivia.
Las talas tienen lugar en plena ebullición de las protestas vecinales contra los cortes de árboles previstos durante la ampliación de la línea 11 de Metro. Una vecina de la zona avisó de la desaparición de los árboles el pasado viernes en esta parte de María de Molina, junto al cruce de Avenida de América.
Al menos cinco de los ejemplares talados eran plátanos de sombra de gran tamaño, con un perímetro de tronco en torno a un metro o superior según el catálogo arbóreo municipal. Otros acababan de ser colocados allí por el Ayuntamiento de Madrid, dentro de las campañas extraordinarias de plantaciones para contrarrestar el temporal Filomena.
Las talas en la acera de los impares de María de Molina se iniciaron el pasado 4 de octubre con el vallado completo de este lateral y el serrado de los ejemplares de plátano de sombra más grandes. Este lunes los obreros terminaban de cargar en un camión los troncos cortados y las ramas restantes.
Según la información disponible en la página del Ayuntamiento de Madrid, responsable de comunicar el plan de movilidad por las obras, los trabajos para los que han sido necesarias las talas de plátanos de sombra son la ejecución del pozo de pilotes para la instalación de los ascensores y el hormigonado.
Antes se talaron los aligustres de Japón, que desaparecieron antes al estar situados en la mediana de la carretera. Su supresión se produjo para reordenar el tráfico de este eje durante las obras y poder desviar a los coches por el lugar que antes ocupaban los árboles. Los trabajos comenzaron el pasado 18 de septiembre, según la información municipal disponible.
Al otro lado de la calle, la tercera hilera de árboles de esa manzana, situada en la zona de los números pares de María de Molina, queda como recordatorio de la frondosidad de las plantas desaparecidas por unas obras que cambiarán de fase a partir del 10 de enero con nuevas ocupaciones en la zona. La Consejería de Transportes explica que todas las acciones están planificadas en tiempo y forma y con la autorización pertinente del Ayuntamiento de Madrid. Y añade que “Metro de Madrid se compromete a restituir los árboles en número y especie”, a través de las correspondientes entregas a los viveros municipales que marca la ley.
La reforma de Avenida de América incluye la instalación de diez ascensores que permitirán habilitar un nuevo recorrido accesible, conectando con los andenes de las líneas 4, 6, 7, 9 y el intercambiador de autobuses de Avenida de América, así como con las entradas a la calle en ambos extremos. Además, se aprovecharán las escaleras de evacuación de los elevadores para la construcción de dos salidas de emergencia y ventilación en el andén 2 de la línea 9.