Anda estos días la calle del Pez huérfana. Le falta Julia, la estatua que desde el 12 de abril de 2003 apoyaba su espalda en el número 42 de esta vía, en el Palacio Bauer -hoy Escuela Superior de Canto. Los vándalos la han mandado al hospital municipal de estatuas, donde será restaurada sin que se conozca, por el momento, fecha de alta prevista.
A Julia la conocíamos bien, tanto al menos como a las otras vecinas de bronce sobre las que ya hablamos en abril de 2009, en los primeros días de Somos Malasaña.
Algunos de nuestros lectores (Andrea, Ángel, Víctor...) nos habían hecho notar su ausencia pidiendo información sobre qué le había ocurrido a la estatua a través de nuestro Facebook. Mientras indagábamos sobre lo sucedido, el diario El País nos ha dado en un artículo la respuesta: el último domingo de octubre, después de que “alguien casi la arrancara de los anclajes que la sujetaban de la pared, los bomberos tuvieron que cortarla porque estaba medio caída”. El parte de daños dice que los vándalos que la atacaron le dejaron “roto el pie izquierdo, en concreto la puntera del zapato que
tocaba el suelo“ y que la han
pintarrajeado.
Como Julia, también falta de nuestras calles la estudiante ('Paseante') que desde 1999 permanecía delante del Centro de Artes Aplicadas y Oficios Artísticos de la calle La Palma, a quien le arrancaron en su día un brazo.