La celebración del festival MadBlue en medio de uno de los parques históricos de Madrid ha originado importantes quejas vecinales por el ruido que el evento dejó en sus alrededores. La Asociación Vecinal Manzanares-Casa de Campo criticó en un comunicado lanzado este domingo el ruido “insoportable” emitido desde el Parque del Oeste, donde se celebraba el evento.
“El volumen de los conciertos está siendo insoportable para los vecinos y vecinas, un volumen de ruido que ha sido autorizado por el Ayuntamiento de Madrid y que, ante las numerosas quejas vecinales ante diferentes instancias municipales, nos han dicho que no se puede hacer nada. Consideramos que debe valorarse este impacto a la hora de autorizar eventos”, explicación desde esta asociación.
El comunicado recuerda que el festival, que se vende como “sostenible”, con “una profunda conciencia ambiental” y cuyo objetivo declarado es “la protección de los océanos”, tiene como principales actores “una promotora y una fundación beneficiaria (Piel de Atún) sin casi actividad conocida hasta el propio Festival y con importantes vínculos de financiación con la Comunidad y el Ayuntamiento”, en alusión a la información publicada el pasado viernes por Somos Madrid.
En el mismo comunicado, la agrupación vecinal también ha afeado la utilización de un comando de voluntarios para tareas de limpieza y mantenimiento de las zonas verdes del Parque del Oeste tras la finalización del evento, “en lugar de asumir un gasto específico de personal de limpieza de residuos”.
Finalmente, ha tachado de “hipócritas” a los gobiernos de la Comunidad de Madrid y del Ayuntamiento por su gestión en materia de medio ambiente, mientras promocionan un festival que promueve la sostenibilidad del planeta y la protección de los océanos “en uno de los parques históricos de la ciudad”. El Gobierno de Ayuso patrocina con 100.000 euros al festival, a través de la promotora Wezama Dreams. El consistorio de la capital, por su parte, mantiene un convenio suscrito con su fundación, a la que ha entregado más de 92.000 euros en los últimos dos años para el desarrollo de su ciclo de conferencias.
Este lunes, el alcalde de Madrid ha asegurado que se analizará la situación para ver si realmente se sobrepasaron los límites de ruido, en cuyo caso tendrán la sanción que corresponda. También ha defendido José Luis Martínez-Almeida que el Ayuntamiento “garantiza el descanso y la calidad de vida” de la vecindad. “Se aplica exactamente a todos los eventos por igual porque es compatible tener los mejores eventos en la ciudad de Madrid con garantizar el descanso y la calidad de vida de los vecinos”, ha explicado. Uno de los últimos festivales en ser multado ha sido el Mad Cool, que recibió 22.001 euros de multa por exceso de volumen en su nueva sede de Villaverde. Antes, el consistorio le había otorgado 1,4 millones de patrocinio.
El festival MadBlue se celebró el sábado 7 y el domingo en el Paseo de Camoens del Parque del Oeste, con un escenario de conciertos situado sobre la carretera y un vallado de todo el perímetro del parque para impedir el acceso del público a las zonas arboladas y con césped. Si embargo, las quejas vecinales por el ruido fueron más allá de la asociación del Manzanares y numerosos vecinos del Paseo del Pintor Luis Rosales se lamentaron del volumen de las actuaciones junto a sus casas.