Se está gestando un desastre económico
Hay alarma creciente en los medios de referencia sobre la escalada de anuncios y de iniciativas que los tres actores principales del escenario comercial y económico del mundo - Estados Unidos, Europa y China- están llevando a cabo en lo que son los primeros pasos de una guerra comercial de dimensiones extraordinarias que ya nadie cree que se pueda evitar. Esto es lo que afirma Le Monde :
“Tras haber maltratado a Europa imponiendo un arancel del 25% a sus exportaciones de acero y del 10% a las de aluminio, Washington, en nombre de la seguridad nacional de Estados Unidos, se prepara para atacar a las exportaciones de vehículos. Europa se dispone a reaccionar. Los socios comerciales de Estados Unidos, entre ellos Europa, piensan imponer aranceles a 252.000 millones de euros de exportaciones norteamericanas. Es decir, al 19% del total”.
Y el diario parisino añade:
“El impacto de una guerra comercial sería comparable al de la gran recesión de 2008-2009, según los expertos de la presidencia francesa. El deterioro de las relaciones con los Estados Unidos inquieta a Bruselas, que se prepara para “el peor escenario”: la ruptura completa de los lazos transatlánticos. El futuro del comercio mundial preocupa a los inversores y las bolsas están particularmente nerviosas”.
Por su parte, el Financial Times informa de lo siguiente :
“Este viernes Estados Unidos impondrá sobretasas a 34.000 millones de dólares de importaciones procedentes de China y se espera que Pekín tase una cantidad similar mientras la naciente guerra comercial entre las dos mayores economías continúa creciendo. Añádase eso a las muchas tarifas y contra-tarifas que se están imponiendo entre Europa y Norteamérica y el valor de las guerras comerciales que el presidente Trump ha lanzado alcanzarán los 100.000 millones de dólares a finales de esta semana”. “Pero eso es sólo el principio. Dentro de no mucho las guerras comerciales de Trump pueden alcanzar el billón de dólares. Eso tendría consecuencias económicas tanto para Estados Unidos como para el resto del mundo. Equivaldría a más de un cuarto de los 3,9 billones de dólares del comercio norteamericano con el resto del mundo del año pasado y alcanzaría el 6% del comercio global de mercancías”.
En otra información el Financial Times destaca la caída que en los últimos días ha registrado el renminbi , la moneda china, y dice lo siguiente:
“Los temores a una repetición de las caídas del renminbi en agosto de 2015 y enero de 2016 están afectando a la actitud de los mercados y los analistas debaten a la hora de explicar la caída de la moneda china. Una de esas explicaciones alimenta la ansiedad respecto a la actitud china: la de que Pekín estuviera permitiendo deliberadamente que el renmbinbi cayera como un instrumento en su disputa comercial con Estados Unidos. “Es muy plausible”, dice Charlie Robinson, economista jefe de Renaissance Capital. Si esa estrategia estuviera siendo conducida por el Banco Popular de China abriría un nuevo frente en las relaciones con Estados Unidos: la guerra monetaria”.
The New York Times: “A Estados Unidos le conviene que López Obrador tenga éxito”
Mientras la prensa norteamericana de derechas demoniza al nuevo presidente electo de México y pronostica toda suerte de desastres en el país vecino, uno de los editoriales del New York Times de este martes contempla la cuestión desde un ángulo completamente distinto:
“Una cosa es segura: las relaciones entre México y Estados Unidos no van a mejorar. Trump es despreciado en México por muchas razones obvias y aunque López Obrador ha dicho que quiere unas relaciones “respetuosas y cooperativas” con Estados Unidos, él mismo es muy consciente que los esfuerzos de su predecesor para forjar unas relaciones positivas con Trump terminaron con su humillación. Y aunque Trump haya felicitado por Twitter a López Obrador por su victoria, la consejera de Trump Kellyanne Conway ha vuelto muy pronto a hablar de la construcción del muro y de que México tendría que pagarlo”. “Si hay un peligro para los Estados Unidos con la elección de López Obrador no es que éste lleve a su país hacia la izquierda radical, sino que no consiga satisfacer las altas expectativas que ha generado. Sus predecesores prometieron muchas de las mismas cosas que él ha prometido, pero terminaron gestionando crisis, no consiguiéndolo. Sin embargo, sus predecesores procedían de partidos establecidos. López Obrador ha añadido a ello la promesa populista de una transformación profunda”. “Si el gobierno de Trump opta por hacerle la vida difícil, sólo profundizará los problemas de México y aumentará el poder de los cárteles de la droga y la desesperación de la gente dirigiéndola contra el norte. Lo que le interesa a México, y por tanto a los Estados Unidos, es que el nuevo presidente tenga éxito”.
Carlos Elordi es periodista. Trabajó en los semanarios Triunfo, La Calle y fue director del mensual Mayo. Fue corresponsal en España de La Repubblica, colaborador de El País y de la Cadena SER. Actualmente escribe en El Periódico de Catalunya.