El presidente de Renault Group Iberia, Josep Maria Recasens, acaba de situarse al frente de la Asociación Española de Fabricantes de Automóviles y Camiones (Anfac) en sustitución de Wayne Griffiths, que dejó el cargo acusando al Gobierno de “inacción” en materia de electrificación del automóvil. Las primeras palabras de Recasens se han dirigido precisamente a este asunto, al declarar que “el único elemento” que genera valor en el sector es el vehículo eléctrico, por lo que, a su juicio, “quien niegue el vehículo eléctrico está negando el progreso”.
Al hilo de esta cuestión, el ejecutivo ha reconocido que los fabricantes chinos “van una generación por delante” de los del resto del mundo en electrificación. “Hay que aceptar una cosa como occidentales: en el vehículo eléctrico conectado, van una generación por delante, y una generación son siete años de vehículos. Creo que lo que hay que hacer es ser humildes y aceptar esa realidad, son mejores que nosotros”, ha señalado Recasens en palabras recogidas por la agencia Europa Press.
Ahora bien, hay cosas que la industria europea y la española en particular están todavía a tiempo de hacer. Nuestro país debe convertirse, afirma la nueva voz de Anfac, en “tractor líder” en la producción de tecnología en torno al vehículo eléctrico y conectado, ya que de lo contrario “España perderá el tren” y se perderá todo “el tejido industrial que ha nacido al servicio del vehículo de combustión”.
“Para que en España tengamos la posibilidad, o al menos el potencial o las condiciones necesarias para que todos estos servicios, estos productos, estas tecnologías crezcan o nazcan (...), el país tiene que dar una respuesta clara y rotunda de que quiere participar en la carrera del vehículo eléctrico. Repito: no solamente para vender vehículos, satisfacer a los clientes, sino para ser tractor líder de nuevas tecnologías asociadas al vehículo eléctrico. Tenemos que dejar de ser un mero fabricante para convertirnos en una potencia tecnológica”, ha incidido Recasens.
En su opinión, nuestro país se enfrenta a una encrucijada de “éxito o fracaso colectivo”. “No puede ser el sector del automóvil el único responsable en descarbonizar la economía” ni “de asegurar crecimiento del vehículo eléctrico. Todos los actores alrededor del sector tecnológico industrial, incluido el sector financiero, juegan un papel clave en la adopción del vehículo eléctrico”.
Sobre los aranceles europeos a los modelos eléctricos chinos, Recasens ha dicho que la motiva menos la prohibición que la competencia, siempre que tenga lugar “en igualdad de condiciones”. Ha advertido además de que “Europa no es Estados Unidos, no tiene la independencia ni tecnológica ni de materias primas que puedan tener los americanos, con lo cual tiene que hacer un ejercicio de equilibrio geopolítico y tecnológico en estos momentos”.
El responsable de Renault en España y Portugal ha indicado en su primera comparecencia como presidente de Anfac que el sector de la automoción en España y Europa se enfrenta a seis retos en los próximos años: la descarbonización, la digitalización, la volatilidad de los precios, la escasez de materias primas, “el tsunami regulatorio” y la transformación de la fuerza laboral.
Desafíos simultáneos
“Nunca antes ha hecho frente a tal cantidad de retos de forma simultánea. Recordemos que históricamente el sector ha tenido una tecnología dominante en un escenario de crecimiento donde la escala y las energías han marcado la pauta del éxito. Las recetas del pasado no son ya válidas para el futuro”. En cuanto al debate público en relación a la descarbonización, Recasens se limita a abogar por la “neutralidad tecnológica”; en otras palabras, por la coexistencia de todas las tecnologías de propulsión.
Según su análisis, la industria se enfrenta en la actualidad a un “trilema” respecto a las tecnologías y fuentes de energía necesarias para descarbonizar el transporte. En primer lugar, que cualquier solución tecnológica tiene que asegurarse el suministro; en segundo, que la energía “tiene que ser limpia y verde”, y por último, que sea competitiva en coste y, en consecuencia, accesible para el cliente. “A día de hoy no hay ninguna tecnología que sea capaz de dar respuesta” a esta triple exigencia, explica.
Acerca de la relación con el Gobierno, el responsable de la patronal asegura que trabajarán conjuntamente para impulsar la electrificación. “Esto no va de Anfac y el Gobierno, va de todos”, ha dicho, por lo que convocará a cuantos actores sea posible para lograr la transformación necesaria de la industria española del automóvil e impulsarla para ser más competitiva.