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'Cambiemos Murcia' contra el reloj

El inicio de la 'Asamblea ciudadana para cambiar Murcia', celebrada este sábado en el Paraninfo de la UMU, estuvo marcado por las cifras: 3º centígrados de temperatura en la calle; 376 euros de coste de alquiler de la sala y del técnico; más de 300 personas abarrotando el recinto y 30 minutos de retraso para empezar. Esos treinta minutos no serán decisivos, pero lo cierto es que el tiempo se agota. Quedó claro y fue recordado en varias intervenciones, y aun así, y a pesar del éxito de convocatoria, la cita comenzó con titubeos.

En la asamblea concurrieron personalidades relevantes de Podemos, de Izquierda Unida y de EQUO, tanto a nivel municipal como autonómico, junto con militantes y simpatizantes de dichos partidos -o de dichas “sensibilidades”, porque se habló más de sensibilidad que de partido-. También hubo ciudadanas y ciudadanos anónimos y llenos de curiosidad. Había gente de toda edad, origen y condición. Personas expertas en movimientos asamblearios y otras que, tal y como reconocieron, nunca habían participado en un evento similar. Pudiera pensarse que había demasiada mezcla para que se pudiera sacar algo en claro, pero al final, 'el principio del principio' de un consenso fue posible.

Desde la mesa de coordinación, Antonio Campillo, Lola Poveda, Álvaro de Berástegui y Toñi Gómez leyeron el manifiesto que dio origen a la iniciativa, “La ciudad que amamos y queremos construir”. También relataron que se había producido un trabajo previo con distintos partidos y colectivos, y explicaron su división en tres grupos para trazar las líneas básicas de la organización, del modelo de primarias y del futuro programa político. Asimismo, se disculparon por no ser profesionales del ramo y defendieron que su único interés consiste en “aunar voluntades y buscar consensos”.

Entre 'ganar' y 'poder', ganó 'cambiar'

El primer punto en el orden del día era votar el nombre que habrá de lucir la candidatura, y ahí hubo disenso. No ya en el nombre elegido, porque aún se debía votar, sino en la existencia de dos de las opciones propuestas: 'Ganar Murcia' y 'Murcia Puede'. Esas dos opciones, de entre seis posibles, fueron cuestionadas por su similitud a dos organizaciones que con bastante probabilidad competirán en el ámbito autonómico: Ganemos y Podemos.

Tras el intento de retirarlas, se mantuvieron y fueron sometidas al juicio de la Asamblea, junto con 'Cambiemos Murcia', 'Marea Murciana', 'Recuperemos Murcia' y 'Otra Murcia es posible'. Existía la posibilidad de añadir alguna más y se materializó en 'Dignidad Ciudadana'. Al final, para alegría de muchos de los presentes, la cuestión quedó resuelta: 'Cambiemos Murcia' será el nombre. Ya 'sólo' faltaba por decidir a qué se le pondrá, y cómo se configurará aquello que ha de llevarlo.

La duda y la necesidad

La pequeña disgresión en torno al nombre suscitó algunas muestras de enojo que fueron gestionadas con dificultad. “Si el nombre nos lleva tanto tiempo...”, expresó un ciudadano que, según confesó, jamás había participado en una asamblea ciudadana. También generó dudas el hecho de que los tres grupos de trabajo no hubieran aportado algún borrador de documento para su exposición y debate. Y llegados a ese punto, del mismo modo que en ocasiones similares, el llamamiento a la unidad salió a la luz.

Un ciudadano clamó por centrar el asunto en el municipio y recordó a lo que se enfrenta la ciudad: “Lo que hay enfrente es enorme, hay que ganar al Partido Popular”. “Si los grupos de trabajo hubieran traído aquí documentos terminados, se habría dicho que ya está todo cocinado y listo, y si lo que se hace es invitar a la participación, también hay quejas... Lo que hay que hacer es participar y correr”, se añadió.

Y no sólo eso, también se mostró la fortuna de Murcia: “Lo que está pasando hoy aquí no va a suceder ni en Cartagena ni en Lorca, y en otros pueblos no sé lo que estará pasando pero me lo imagino”, se esgrimió. Sin embargo en la capital de la Región se está dando la oportunidad, nacida de la necesidad y de la voluntad de los presentes. Y el tiempo corre, recordaron. Un 'aplauso cerrado' cerró el capítulo de las dudas.

Las primarias

Y a partir de ahí, la Asamblea cogió ritmo. Lo siguiente fue la exposición y la votación favotable del proceso de primarias, que se sustentará en varios criterios: el voto será múltiple porque cada votante podrá elegir hasta seis candidatos; será preferencial, porque el votante tendrá que ordenar los candidatos según sus preferencias, del primero al sexto; será plural, porque cada sensibilidad estará representada de manera proporcional; será abierto, porque podrá votar cualquier persona mayor de 16 años residente en el municipio de Murcia, sin importar su nacionalidad. Y el resultado será ponderado.

La ponderación vendrá dada por la asignación de una cantidad de puntos para cada elección del votante, de modo que la primera opción recibirá 36 puntos; la segunda, 25; la tercera, 16; la cuarta, 9; la quinta, 4; y la sexta opción de cada votante recibirá 1 punto. Por último, los resultados obtenidos serán corregidos por género para configurar una 'lista cremallera', de modo que se vayan alternando mujeres y hombres.

Dos apuntes más sobre las primarias que han sido aprobados: los candidatos y candidatas elegidas tendrán que cumplir los requisitos exigidos en las leyes, además de suscribir el código ético, comprometerse a cumplir el programa y someterse a la autoridad de la asamblea. Por último, el cabeza de lista deberá mantenerse neutral al respecto de la campaña electoral autonómica, norma que indica el previsible enfrentamiento en el espacio regional entre partidos -o sensibilidades- que, en el caso de la capital, sí que piensan unir sus fuerzas. Las sensibilidades mayoritarias constituirán un comité para velar por la limpieza del proceso.

No obstante, el sistema de primarias no quedó hoy totalmente atado. Aún falta por definir el sistema de votación, que podrá ser sólo presencial, o presencial y telemático, dependiendo de la capacidad económica y de la conveniencia de hacerse con los servicios de alguna empresa tecnológica que gestione el voto por Internet.

El calendario

Casi hubiera podido asumirse un calendario sin necesidad de definirlo por escrito, dado que las fechas son ya muy escasas. Pero se definió para que no haya lugar a dudas. También se apuntó a la creación de un 'comité de dinamización' que empuje en el cumplimiento de los plazos:

El 9 de febrero habrá una nueva sesión de los grupos de trabajo en Santiago El Mayor, a la que están invitados todos los ciudadanos inscritos y los que quieran participar en la definición del resto de las cuestiones pendientes, en especial la elaboración de los borradores de los documentos organizativo, político y ético.

El 18 de febrero a las 18 horas, los borradores de los documentos serán puestos en conocimiento de los participantes para su lectura, y para que se puedan proponer enmiendas por escrito que serán llevadas a la siguiente asamblea.

El 21 de febrero tendrá lugar la siguiente asamblea ciudadana en el mismo escenario que este sábado. En ella se votarán los documentos y se aprobará el calendario de primarias que se ha esbozado, y que sigue a continuación:

Del 1 al 8 de marzo tendría lugar la presentación de candidaturas.

El 9 de marzo se revisarían.

Entre el 10 y el 19 de marzo se proclamarían las candidaturas y se llevaría a cabo la campaña electoral.

En los últimos días del mes se votaría, a falta de conocer si sólo será posible hacerlo de manera presencial o también telemática, para que el 26 o 27 de marzo se produjera la proclamación de candidatos y candidatas electas.

Los dos últimos días de marzo, el 30 o el 31 (lunes o martes), habría que presentar las listas ante la Junta Electoral.

Queda pendiente otro asunto no menor: la forma jurídica que ha de adoptar la hipotética unión de “sensibilidades” políticas y ciudadanas, extremo que oscila entre la coalición formal de partidos o la agrupación de electores -aunque bien pudiera concluir en una tercera vía-. Entre los pros y los contras de cada opción habrá que considerar los requisitos legales que traen consigo y el tiempo que requieren. Porque el tiempo que sigue corriendo.

Y así, la asamblea terminó como empezó: con cifras. 644: los euros recaudados, que dan para pagar el alquiler de la sala en esta primera asamblea y para más de la mitad del próximo evento. Y 52: los días que quedan para el 31 de marzo. Por entonces ya se sabrá si 'Cambiemos Murcia' se sitúa al fin en la línea de salida.