La Fiscalía ha archivado la investigación contra un inspector de la Policía Local de Murcia que obligó a la cantante Rocío Sáiz a cubrirse los pechos durante un concierto en el Orgullo de Murcia el pasado 24 de junio. Según ha comunicado el Ministerio Público al gabinete de abogados de la artista no han considerado que se produjera un delito de odio ni homofobia, aunque sí aprecian uno de coacciones leves. Los abogados de Sáiz han confirmado a este periódico que interpondrán una denuncia contra el inspector en los próximos días, tal y como adelantó la cantante ya el pasado 21 de diciembre tras prestar declaración vía telemática ante la Fiscalía.
Sobre los hechos que han motivado la investigación, la cantante contaba en una entrevista con este diario que “le dije (al policía) que no me iba a vestir, esta parte del show la llevo haciendo diez años”. El agente –según el relato de la cantante– le dijo que o bien se “ponía la camiseta” o se iba “esposada”.
Los responsables del evento cubrieron a la cantante con una bandera LGTBI ante la amenaza por parte de la Policía de suspender el concierto. Una persona encargada de la organización del concierto declaró hace un mes como testigo en la investigación: “En menos de seis meses sabremos si hay juicio o lo desestiman”, ha explicado a elDiario.es.
La Policía Local de Murcia pidió disculpas tres días después de lo ocurrido durante el concierto y también abrió un expediente interno para investigar la actuación del agente. La Policía afirmó que “el inspector en cuestión actuó por iniciativa propia, siendo su actuación no correcta y no informando en ningún momento de su intervención a la cadena de mando”.
En la nota de prensa publicada por la Policía también señalaron que son una institución “sensibilizada con el colectivo LGTBIQ+ y otros tantos colectivos y organizaciones”.