El colapso de la red de rastreo lleva a Navarra a dar por buenos los miles de positivos en autotest

El colapso de la red de rastreo ocasionado por el gran número de contagios diarios registrados en las últimas semanas que han disparado la incidencia acumulada por encima de los 2.300 casos de COVID-19 por cada 100.000 habitantes, ha llevado al Departamento de Salud del Gobierno de Navarra a modificar el protocolo de actuación en Atención Primaria. Así, a partir de ahora en la comunidad foral se dará por bueno un positivo diagnosticado por autotest, incluidos los test de antígenos que se venden en las farmacias, sin necesidad realizar una PCR que confirme el contagio.

Este nuevo protocolo, firmado por el gerente de Atención Primaria, Manuel Carpintero, y que ya ha sido remitido a los centros de salud de la comunidad foral, recoge también que para levantar la cuarentena de los casos positivos, incluidos los diagnosticados por autotest, no será necesaria una prueba PCR negativa, sino que pasados los 10 días de aislamiento, “siempre que hayan transcurridos tres días desde la resolución de la fiebre y del cuadro clínico”, el paciente podrá reincorporarse “a la actividad laboral”.

Otra novedad que recoge el protocolo es que en los próximos días de recibir el SMS en el que se confirma el positivo por COVID-19, desde el centro de salud se llamará al paciente para “la indicación de aislamiento e información de síntomas de alarma y pautas de actuación”. En esta misma llama, añade el documento, se informará al paciente que deberá ser él quien comunique a sus contactos estrechos “las pautas de comportamiento” que deben llevar.

Con este nuevo cambio de protocolo, sumado a las restricciones anunciadas ayer por el Gobierno foral, entre las que se incluyen el cierre de bares y discotecas a la 1.00 de la madrugada, Salud busca descongestionar la Atención Primaria, que en estos momentos e encuentra “muy tensionada”, tal y como reconocía hace unos días el director general de Salud, Carlos Artundo. El aumento de los contagios, sumado a la campaña de vacunación y toda la actividad no COVID, ha llevado a los centros de salud y a sus profesionales a una saturación que ahora se intenta aliviar.

Por ello, también se ha modificado el sistema de detención del Servicio Navarro de Salud (Osasunbidea), que ahora prioriza a los casos que tienen mayor riesgo de desarrollar síntomas graves en caso de ser positivos.