Navarra abonará unos 20.000 euros de media a los agentes de la Policía Foral
El Gobierno foral ha aprobado el reglamento que mejora las condiciones laborales de los agentes del cuerpo autonómico que tendrán un coste anual de 7,3 millones de euros y que tiene carácter retroactivo desde enero de 2019
El Gobierno de Navarra ha aprobado este miércoles el Reglamento de horarios, jornadas y retribuciones de la Policía Foral con el que se mejora el salario, así como el resto de condiciones laborales, de los agentes del cuerpo autonómico. La mejora retributiva tendrá carácter retroactivo desde enero de 2019 y se abonará en una única paga en la nómina de noviembre. Según ha apuntado la consejera de Interior, Amparo López, el coste de este pago con carácter retroactivo será de unos 23,2 millones de euros (una media de 21.090 euros por agente).
Los 1.100 agentes que componen el cuerpo de la Policía Foral se beneficiarán de la subida salarial, que los sindicatos calculan que será de unos 200 euros mensuales por agente de media, que tendrá un coste de 7,4 millones de euros anuales. La subida salarial no será la misma para todos los agentes, se calculará de manera individualizada a partir del informe de valoración de puestos de trabajo elaborado en 2019 y en el que se diferencian seis puestos distintos dentro de la Policía Foral: policía, cabo, subinspector, inspector, comisario y comisario principal y en el que también se tienen en cuenta la preparación técnica, el grado de dificultad, el régimen de horarios, la penosidad, nocturnidad o el especial riesgo y dedicación de cada uno de los puestos. Asimismo, también se estipula otra serie de retribuciones tales como indemnizaciones por viajes o compensación de las horas realizadas fuera de la jornada ordinaria.
Amparo López ha señalado que el Gobierno vasco, inmerso en una negociación de mejora de condiciones con la Ertzaintza, ha solicitado al Ejecutivo foral este informe de valoración de puestos de trabajo que ha servido de base para calcular las mejoras salariales de cada uno de los agentes de la Policía Foral.
El reglamento también incluye una mejora en las jornadas y horarios, estableciendo sistemas concretos para cubrir servicios. Por ejemplo, mediante la implantación de la disponibilidad horaria (bolsa de horas), una figura que, “desde la voluntariedad de los y las agentes”, permitirá una mayor presencia de estos y que será retribuida específicamente, o los llamamientos, figuras estas dos que contribuyen a la prestación continuada de un servicio que, por su naturaleza, no cuenta con listas de contratación como en el resto de ámbitos de la Administración. En ese sentido, la consejera ha resaltado que “contribuye a una mayor disponibilidad de los y las agentes y presencia, siempre respetando las normas de descanso del personal o la garantía de los periodos vacacionales, licencias, permisos o cualquier otra situación sobrevenida”.
En cuanto a los horarios, el reglamento articula hasta tres tipos diferenciados de acuerdo a las distintas funciones atribuidas a las unidades de Policía Foral: horario general, horario flexible y horario de cómputo en días, pudiendo adaptarse y actualizarse las unidades de cada uno de estos tipos mediante orden foral. Entre otros ámbitos, las guardias localizadas, hasta ahora compensadas con tiempo, pasan a estar remuneradas, permitiendo una mayor disponibilidad de recursos en divisiones como la de Policía Científica.
La consejera de Interior ha destacado que el reglamento “reconoce la naturaleza singular y exigencia de la labor policial” según criterios de riesgo, disponibilidad y localización permanente y redunda en una “organización más eficiente” supone a su vez un “mejor servicio de protección y seguridad a la ciudadanía”, ha asegurado. Asimismo, ha recalcado el intenso trabajo desarrollado por el Gobierno con el cuerpo autonómico y los sindicatos para llegar a la aprobación de un reglamento que implica una “clara mejora” de las condiciones laborales, ha finalizado.