El consejero de Desarrollo Rural y Medio Ambiente del Gobierno de Navarra, José Mari Aierdi, ha anunciado este martes en el Parlamento foral la puesta en marcha de medidas adicionales ante el repunte de ataques de osos en el Pirineo. En concreto, se va a dotar a los ganaderos de teléfonos móviles satelitales para que puedan estar en contacto directo con el Guarderío de Medio Ambiente en cualquier momento y sin problema de cobertura.
Además, considerando que el oso es un animal de hábitos y está comprobado que accede al territorio navarro por la misma zona, se van a instalar cámaras de fototrampeo, también vía satélite, en esos lugares estratégicos para poder advertir de la presencia del oso y así monitorizarlo y tener especial precaución en la zona.
En una comparecencia solicitada por UPN, Aierdi ha detallado que el Departamento viene adoptando diversas medidas preventivas, como ayudas para contratación de pastores que ayuden al ganadero, perros mastines, localizadores GPS para el rebaño o cercados, además de las indemnizaciones por ataque y por ganado muerto, que ha considerado eficaces ante los ataques que se han registrado en los últimos años. No obstante, ha afirmado que ante el repunte de este año y la previsión de que la población de osos vaya creciendo, se han planteado las dos nuevas medidas de refuerzo para favorecer la convivencia entre el oso y la ganadería.
El consejero ha explicado que el último ataque se registró el viernes pasado y ha indicado que es una situación que este año viene sucediendo “en repetidas ocasiones”. Se estima que hay 83 osos en el conjunto del Pirineo. Aierdi ha señalado que el departamento está en contacto directo con los ganaderos de la zona, entidades locales y la Junta del Valle de Roncal para abordar posibles soluciones y otras medidas, no solo relacionadas con el oso, sino también en fomento de la ganadería extensiva, medidas de acompañamiento en el territorio, mejora de infraestructuras (como pistas, etc.) y apoyo económico a la Escuela de Pastores, iniciativa de la Junta General del Valle de Roncal y dinamizada por la asociación para el fomento de la ganadería extensiva Artalde.
Aierdi ha indicado que “la tendencia negativa de la ganadería extensiva es un problema creciente en Navarra, y especialmente preocupante en el Valle del Roncal”, y ha añadido que el crecimiento de la población del oso hace que se incremente el número de conflictos. “Lo obligación de las Administraciones no es ponernos una venda sino afrontar esa realidad y gestionar un territorio en el que conviven estos datos”, ha afirmado.
El consejero ha señalado que se puede dar “una coexistencia pacífica entre la permanencia del oso y las actividades tradicionales y, en este sentido, lo que es la ganadería extensiva fundamentalmente”. “Hay un conflicto y ante ese conflicto tenemos que ser capaces de tomar las medidas de precaución y las medidas compensatorias oportunas que corrijan de la mejor manera posible estas incidencias, incidencias que no podemos hacer que se carguen sobre las espaldas de las personas que viven en el territorio, de los ganaderos y ganaderas de este ámbito, sino que tienen que ser asumidas por el conjunto de la sociedad”, ha señalado.
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