Pamplona reflexiona sobre la perspectiva de género en la cobertura de la violencia sexista
A la espera de que el Tribunal Superior de Justicia de Navarra aborde el próximo 7 de noviembre los recursos interpuestos por acusaciones y defensas contra la sentencia que condenó a los integrantes de la manada por abuso y no por agresión sexual, Pamplona reflexiona sobre diferentes aspectos de la violencia sexista. La redactora jefa de género de eldiario.es, Ana Requena, ha ofrecido una ponencia sobre la perspectiva de género y la responsabilidad de los medios en la cobertura de estas violencias. Ha defendido un trabajo “responsable”, que en su opinión “ha contribuido a la cuarta ola feminista”, donde “la denuncia de la violencia sexual tiene un papel central”. Ha citado como ejemplo el trabajo del New York Times sobre el caso Weinstein, que dio origen al movimiento #metoo.
En una escala más regional, el impacto mediático y social de la sentencia contra la manada solo puede explicarse “por el momento histórico de efervescencia feminista”, que no obstante obliga a las periodistas a “plantear muchas preguntas” para hacer “bien” su trabajo. Desde “no revictimizar a las mujeres con nuestro trabajo, evitar el morbo, los detalles escabrosos” hasta “enmarcar la violencia sexual como un producto de la sociedad patriarcal en la que vivimos”, ha defendido Requena.
En su opinión, “las violencias sexistas deben ser contadas y formar parte de la agenda de los medios de comunicación”, y aunque el papel de los medios pueda y deba ser cuestionado “no es mejor volver a meter las violencias en el armario y no hablar de ellas; debemos hacerlo mejor”, ha defendido.
El blog micromachismos de eldiario.es trata de hacerlo desde hace 5 años. “Hubo una reacción impresionante. Hablamos de machismos cotidianos: actitudes, comportamientos, prejuicios, tics. Nos suceden a diario, pero pasaban desapercibidos. Se les quitaba importancia. Nosotras mismas nos avergonzábamos”, ha explicado Requena, que ha afirmado que desde el primer día recibieron “cientos de correos de mujeres, de todo tipo e intensidad. Violencia sexual, acoso, hostigamiento callejero… había necesidad de romper ese silencio, y también de que los medios lo recogiesen”.
Estas cosas estaban tan asumidas que no había ni siquiera cobertura, “necesitábamos asesinatos o casos sangrientos, era necesaria la violencia para aparecer en los medios”.
Y aunque “el panorama ha cambiado mucho” estos últimos años, Requena ha reconocido que el periodismo “puede contribuir a una cosa y la contraria en el mismo campo: hay medios que no se esfuerzan en absoluto, que agreden incluso a las mujeres”, ha denunciado. “Buscan el clic fácil para la indignación, con titulares falsos incluso, pero les da igual. Buscan notoriedad, visitas”. Afortunadamente, son una minoría, y la mayoría “intenta aportar cierta perspectiva de género, se esfuerzan por hacer cosas mejor, incorporar buenas prácticas. Aunque a veces cometemos errores, como es normal”.
Requena ha criticado los “tics” del periodismo tradicional de “contar más y más rápido”, pues en el caso de las violencias contra las mujeres “puede ser contraproducente, alejar el foco de lo importante y revictimizar a la víctima”. Así, ha citado las informaciones que indagaban en la vida personal de la chica atacada por la manada como un ejemplo de qué no se debe hacer.
Asimismo, ha trasladado la reflexión a los asesinatos de violencia de género: “No debería haber prisas, sino máximo rigor. No aporta nada. En eldiario.es esperamos. Detalles, contenido. A ver si nuestras delegaciones pueden comprobar. No es falta de interés, lo contrario. Cautela para evitar malos titulares, humanizar a las víctimas”.
El hecho de que la manada recibiera tanta atención mediática también ha sido objeto de reflexión. Requena la ha encuadrado en el hecho de que sucediera en una fiesta de proyección internacional como los Sanfermines, que fuera una violación múltiple, la detención rapidísima de los sospechosos, la prisión preventiva contundente… todo ello en el contexto de “ruptura del silencio, de efervescencia feminista”.
Más allá del revuelo mediático, “lo que podemos sacar de bueno es la oportunidad para poner en la agenda política, social y mediática la violencia sexual. Lo que faltó en muchos casos fue contexto. Para no dar idea de que la manada era una excepción, sino la punta del iceberg de la violencia sexual en este país”.
Como en tantos otros campos, “uno de los problemas más graves que tenemos son los prejuicios”. En las sentencias, los juzgados, pero también en el periodismo. “Piezas que cuestionan a las mujeres porque no denuncian, comentarios como los vertidos por la prensa deportiva sobre la presunta violación de Cristiano Ronaldo…”, ha denunciado.
Para terminar, Ana Requena ha demandado “nuevos paradigmas para contextualizar estas violencias. Un trabajo colectivo para adaptar la perspectiva de género en las redacciones; no puede ser algo individual”. Porque el periodismo sobre violencias sexistas “tiene que ser tan insistente como cualquier otro. Preguntar a los actores. Debe hacerse de forma continua, no solo con grandes casos. Siempre con perspectiva de género, ir más allá de las violencias. Somos mucho más que víctimas”, ha concluido.
Congreso Internacional sobre Violencias Sexistas
El Baluarte de Pamplona acoge desde el jueves y hasta mañana sábado el Congreso Internacional sobre Violencias Sexistas, organizado por el Ayuntamiento de Pamplona y que cuenta con una veintena de ponentes y un aforo completo de 300 participantes. Durante el encuentro se abordan temas relacionados con el derecho, la comunicación, la investigación y el activismo feminista, y se desarrollará a través de ejes de trabajo, mesas redondas y espacios de reflexión y debate.