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El nuevo consejero de Salud destaca los problemas de Urgencias desde el inicio: “Faltó planificación”

Una apertura por fases, en la que convivieran las nuevas Urgencias del Complejo Hospitalario de Navarra con las de Virgen del Camino, habría permitido a la plantilla acostumbrarse al nuevo servicio y así facilitar este proceso. Ese habría sido, según el nuevo consejero navarro de Salud, Fernando Domínguez, el escenario “más prudente” para abrir las nuevas Urgencias. Sin embargo, el recinto arrancó su actividad “de forma precipitada”, y de ahí que el malestar de la plantilla continúe en la actualidad. Integrantes del personal de Urgencias del CHN ya habían expuesto así la situación en el servicio, sindicatos como ELA o LAB la habían destacado y, ahora, el consejero se muestra de acuerdo con esa valoración. Domínguez (nombrado por Geroa Bai) cree que ha faltado “diálogo y planificación” en esta ambiciosa medida, a pesar de que su antecesora, Marta Vera (UPN), siempre defendió que era una cuestión de tiempo que el personal se adaptara. Pero el “caos” de las Urgencias, según ha denunciado el sindicato ELA, ya ha llamado a las puertas del Gobierno Foral.

Domínguez, en declaraciones a eldiarionorte Navarra, cree que el problema viene desde el inicio del proyecto porque “esas Urgencias estaban pensadas exclusivamente para el Hospital de Navarra y pasaron a ser las del todo el complejo” por lo que, para empezar, considera que la ubicación de la infraestructura, cercana al Hospital pero alejada de Virgen del Camino, no es la adecuada. Personal celador ya ha denunciado, por ejemplo, que la distancia entre ambos recintos, cubierta por pasillos subterráneos, es excesiva.

Vera, antes de la inauguración, aseguró que estas reticencias al nuevo edificio eran una cuestión de “miedo al cambio”, pero diversos sindicatos (LAB, ELA, SAE, SATSE, el Sindicato Médico…) alegaron que no era así y ya antes del 8 de octubre de 2014, fecha del estreno, algunos de ellos valoraron las innovaciones del nuevo edificio (en 2011 se presupuestó por 21,3 millones de euros), pero también advirtieron de que habían faltado ensayos de funcionamiento, mostraron su disconformidad con los nuevos turnos y hablaron, en general, de “improvisación”. El Departamento fue insistente en su defensa del sistema pese a las constantes llamadas de atención de la plantilla, y un grupo de trabajo incluso facilitó un informe alternativo a los grupos parlamentarios para poner en evidencia las carencias del servicio.

Ahora, mientras representantes de la plantilla siguen denunciando problemas de organización, falta de personal y de material, así como dificultades para facilitar el acceso de los y las pacientes a las camas, ¿qué soluciones pueden plantearse? Domínguez asegura que conoce de cerca esta problemática, ya que desde 2013 hasta 2015 ha sido el director de la Unidad Clínica de Cirugía Mamaria del CHN, y que por tanto su primer paso será hablar con la plantilla. Así se recoge en el acuerdo programático, pero personal de diferentes estamentos ha mostrado su preocupación por que únicamente se consultara a las Jefaturas. Y, en parte, ha generado suspicacias entre miembros de la plantilla la designación de Antonio Merino como director gerente del CHN, quien, por ejemplo, en 1999 ya fue director gerente del Hospital de Navarra y, en 2011, jefe del Servicio de Coordinación, Calidad y Control Asistencial del Servicio Navarro de Salud.

Domínguez, por su parte, ha asegurado que “hablaremos con todos, está claro que será así, porque son ellos los que están sufriendo esta situación”. Fuentes de la plantilla insisten en la necesidad de contactar directamente con el personal, de las carencias de la organización, de los problemas que generan el cierre de camas en verano y de la necesidad, ya más de fondo, de “educar” a la ciudadanía en general sobre el uso de los servicios sanitarios. Este es el diagnóstico con el que prácticamente arrancaron las nuevas Urgencias, y que se mantiene diez meses después.