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Siempre nos quedará la UNED
Tengo veintiséis años, una carrera y un máster. También trabajo (soy afortunada). Pero me apetece seguir aprendiendo. Estudiar por placer. Ya que a los dieciocho no lo enfoqué así. Me interesa el grado en Historia y Política de una universidad pública de Madrid. Solicito todo el papeleo y me aceptan. Pero a la hora de hacer la inscripción me dicen que sólo hay dos opciones: jornada completa o media jornada. Eso quiere decir que tengo que inscribirme en un mínimo 30 créditos. Con mi trabajo no puedo permitirme cursar 6 asignaturas de golpe. Quiero tomármelo con calma. No persigo sacarme una titulación. Me insisten que las normas son las normas. Pienso: bueno, si voy a estudiar 6 asignaturas al menos que sean de las que me interesan muchísimo. Miro en otros cursos más adelantados donde hay materias un poco más complejas. Me dicen que no, mi ciela, que hasta que no cursas todas las de primero, no pasas a segundo, tienes que volver a hacer la de Comunicación Oral y Escrita que hiciste hace ocho años donde te enseñan a escribir sin faltas de ortografía. Te dicen que si pagas 500 euros te la convalidan y ya está. Aunque también puede que no te la convaliden. Tú pagas y ellos ya ven… Les insisto que yo no quiero que me convaliden nada, que no quiero graduarme, que sólo quiero pagar unas asignaturas y cursarlas. Me repiten que las normas son así. Les pregunto si al menos puedo ir como oyente y una vez más me dicen no, mi ciela. Finalmente, la propia decana de la facultad me escribe un mail y me recomienda que pruebe en la UNED. Yo quiero aprender con profesores, ir a clase y relacionarme con gente. Pero se ve que las normas son las normas y a mí ya se me ha pasado el turno.
Tengo veintiséis años, una carrera y un máster. También trabajo (soy afortunada). Pero me apetece seguir aprendiendo. Estudiar por placer. Ya que a los dieciocho no lo enfoqué así. Me interesa el grado en Historia y Política de una universidad pública de Madrid. Solicito todo el papeleo y me aceptan. Pero a la hora de hacer la inscripción me dicen que sólo hay dos opciones: jornada completa o media jornada. Eso quiere decir que tengo que inscribirme en un mínimo 30 créditos. Con mi trabajo no puedo permitirme cursar 6 asignaturas de golpe. Quiero tomármelo con calma. No persigo sacarme una titulación. Me insisten que las normas son las normas. Pienso: bueno, si voy a estudiar 6 asignaturas al menos que sean de las que me interesan muchísimo. Miro en otros cursos más adelantados donde hay materias un poco más complejas. Me dicen que no, mi ciela, que hasta que no cursas todas las de primero, no pasas a segundo, tienes que volver a hacer la de Comunicación Oral y Escrita que hiciste hace ocho años donde te enseñan a escribir sin faltas de ortografía. Te dicen que si pagas 500 euros te la convalidan y ya está. Aunque también puede que no te la convaliden. Tú pagas y ellos ya ven… Les insisto que yo no quiero que me convaliden nada, que no quiero graduarme, que sólo quiero pagar unas asignaturas y cursarlas. Me repiten que las normas son así. Les pregunto si al menos puedo ir como oyente y una vez más me dicen no, mi ciela. Finalmente, la propia decana de la facultad me escribe un mail y me recomienda que pruebe en la UNED. Yo quiero aprender con profesores, ir a clase y relacionarme con gente. Pero se ve que las normas son las normas y a mí ya se me ha pasado el turno.