Vox y el PP convierten el juicio al procés en otro campo de batalla por el electorado más a la derecha
En plena batalla por el votante más a la derecha, el Partido Popular y Vox llevan toda la semana intentando atribuirse la celebración del juicio del procés que ha arrancado esta semana en el Tribunal Supremo.
Los populares argumentan que fue el Gobierno de Mariano de Rajoy el que, a través de la Abogacía del Estado, denunció en 2017 a los líderes independentistas que hoy se sientan en el banquillo de los acusados por su papel en la convocatoria del referéndum del 1-O y la declaración unilateral de independencia. Vox, por su parte, que ejerce de acusación popular en la causa, sostiene que fue su organización la que instó a la investigación de unos hechos que consideró “constitutivos de delito” y que ahora están siendo enjuiciados.
El cuerpo a cuerpo entre PP y Vox por su papel en el procesamiento de los líderes del procés lo iniciaba el número dos de los populares, Teodoro García Egea, este martes. Sin citar directamente al partido que preside Santiago Abascal, el secretario general del PP advirtió de que “si hay partidos políticos que utilizan la acusación particular para hacer política, pues es algo que hace daño a la justicia y al ordenamiento jurídico”.
“Los políticos no deberíamos dedicarnos a esto sino que tendríamos que centrarnos en legislar y en mejorar la vida de la gente, y que a la justicia se la respete dejándole el margen que constitucionalmente tiene para impartir sentencias y ley en base al ordenamiento jurídico que nos hemos dado”, señaló la mano derecha de Pablo Casado en rueda de prensa, apenas unos minutos después de que comenzara el juicio en el Supremo. Los populares son partidarios de limitar la personación de partidos en causas judiciales, aunque por el momento no tienen previsto presentar ninguna iniciativa legislativa al respecto.
“El PP actúa”
Desde el mismo martes, el PP sacó pecho de su supuesta contribución para la celebración del juicio. “Si este juicio empieza hoy es porque el Gobierno del PP lo denunció en septiembre de 2017. Sin aquello no estaríamos hoy aquí. Fue un Gobierno del PP el que impidió, con la ley en la mano pero con determinación y la legitimidad de la Constitución, que fructificasen los presuntos actos delictivos que hoy se juzgan”, apuntaron los populares en un comunicado, apelando a la aplicación del artículo 155 de la Constitución por parte del Ejecutivo de Rajoy.;
El partido convirtió esa reivindicación de su labor para que se juzgue el procés en toda una campaña en las redes sociales. “El PP no da ruedas de prensa en las puertas del Tribunal Supremo, el PP actúa”, señaló el partido en un tuit, en clara alusión a Vox, que este martes comparecía ante los medios antes del comienzo del juicio en el que ejerce de acusación popular. “Fuimos nosotros quienes destituimos al Gobierno de la Generalitat, intervinimos las cuentas en Cataluña y les llevamos ante el Supremo. Ahora es el tiempo de la justicia y la Constitución”, añadía el PP en su mensaje.
El tuit estaba acompañado de una foto del juicio del procés en la que se puede ver a los procesados sentados en el banquillo y sobre la que los populares escribieron: “Si están ahí sentados es porque había un gobierno del PP”.
Esta estrategia de los populares enervó a la formación que preside Santiago Abascal, que se lanzó a criticar duramente al PP por su campaña. “El Gobierno del PP no hizo lo que tenía que hacer. Fuisteis vosotros quienes malgastasteis el artículo 155, no tocasteis TV3 ni la educación en Cataluña y convocasteis unas elecciones para hacer presidente a Torra”, señaló Vox en un tuit.
“Que se deje trabajar a la justicia”
El coordinador jurídico del partido de extrema derecha, Pedro Fernandez, señalaba después que “el PP se ha convertido y se convertirá en el mejor testigo de la defensa” de los líderes del procés que se sientan en el banquillo de los acusados por delitos de rebelión por “colgarse medallas que no le corresponden” sobre la aplicación del 155.
“Se han cubierto esta tarde [por el martes] con manifestaciones en redes sociales en el sentido de que ellos aplicaron el 155 y llevaron a los golpistas a los tribunales cuando lo cierto es que en su momento desactivaron el 155 e hicieron lo posible por negociar incluso con los golpistas para intentar una solución política”, apuntó Fernández.
Este miércoles el líder del PP, Pablo Casado, evitaba entrar en el enfrentamiento directo con los dirigentes de Vox con los que la dirección popular espera poder llegar a acuerdos de gobierno como el alcanzado en Andalucía después de las elecciones autonómicas y municipales e incluso de las generales, si finalmente las adelanta el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez. Lo que le preocupa al presidente de los populares, “es que se deje trabajar a la Justicia con libertad”, algo que, a su entender, “está pasando” en el juicio.
“Estamos muy satisfechos de la contribución que ha tenido el PP para que este juicio se esté celebrando”, insistía Casado, porque, a su juicio, “gracias” a que el Grupo Popular recurrió el Estatut de Catalunya, los líderes independentistas están siendo juzgados en el Tribunal Supremo y no en el Tribunal de Justicia de Catalunya. “No pongo en duda la independencia de los jueces catalanes sino el procedimiento de elección que pretendía el Estatut y fue el que se evitó gracias al recurso de inconstitucionalidad”, zanjaba.
Una complicada relación
PP y Vox mantienen desde hace meses una complicada relación –similar a la que sostienen los populares con Ciudadanos– que les lleva por un lado a compartir ideario, pactar para formar gobierno en Andalucía –así como plantearse acuerdos futuros en otras instituciones– y coincidir en la convocatoria y en el escenario de la protesta contra el Ejecutivo de Pedro Sánchez del pasado domingo en la Plaza de Colón de Madrid y, por otro, a disputar una permanente batalla por el electorado más conservador.
La lucha se agudiza además por momentos a medida que se acerca el nuevo ciclo electoral –en mayo habrá comicios autonómicos, municipales y europeos– al que, tras tumbarse este miércoles los Presupuestos del Gobierno, se suma el adelanto de las generales.
El equipo de Casado quiere, no obstante, enfriar cualquier tipo de enfrentamiento con Vox, sobre todo ante el previsible adelanto electoral por parte de Sánchez y la necesidad del PP de pactar con la extrema derecha y Ciudadanos en el caso de que sus escaños sumen para conformar gobierno en la nueva legislatura. “No vamos a polemizar con nuestros posibles socios”, concluyen fuentes de la cúpula del PP. “Es el momento de reenamorar a nuestros exvotantes”, zanjan en Génova 13.