El Gobierno insta a Iglesias a que abandone los “egos personales” y negocie primero el programa
El Gobierno emplaza a Unidas Podemos a aceptar su propuesta de volver a la “casilla de salida” para empezar a negociar la investidura a partir de los contenidos -un acuerdo programático- y, a partir de ahí, abordar la composición del Gobierno. “España necesita ya un Gobierno, no para la satisfacción de quienes se sientan en él”, ha comenzado la portavoz, Isabel Celaá, la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros.
Sin citarle expresamente, Celaá se ha referido a su “socio preferente”, Pablo Iglesias, para pedirle que abandone los “orgullos y egos personales” y se avenga a negociar el programa. “Esto no es una cuestión de orgullos o egos personales, es una cuestión de Estado -ha afirmado Celaá-. Por eso lo primero que tenemos que saber es qué vamos a hacer y lo segundo es cómo se va hacer”.
Los socialistas han señalado directamente a Iglesias como el responsable de que se trunquen las conversaciones para la investidura por sus exigencias personales. El líder de Podemos reclama su presencia en el Consejo de Ministros. Sánchez se abre ahora a incorporar miembros del grupo confederal al gabinete pero con perfiles técnicos y no políticos, aunque Celaá ha asegurado que el PSOE no tiene “vetos a personas”. “El presidente ha hablado de la incorporación de personas con determinados perfiles a su Gobierno; esto también ha sido aparentemente rechazado”, ha confirmado Celaá.
“Hay que hablar de contenidos, hay que hablar de programa; por eso el PSOE ha presentado una propuesta programática progresista y abierta. Habrá que comprobar el grado de consenso que se pueda alcanzar y las diferencias sobre esa propuesta programática y luego tendrá que decidirse quiénes pilotarán esa oferta programática”, ha explicado. El Gobierno deja así el tejado sobre Podemos, que asegura que se debe negociar un “acuerdo integral” que incluya al mismo tiempo los contenidos y los cargos. “No tenemos ningún veto personal a nadie, pero es posible que quien no quiera o excluya esa metodología -ha dicho sobre la propuesta de Sánchez de alcanzar primero el acuerdo programático y abordar después la composición del Gobierno- puede que tenga una desconfianza. Nosotros no tenemos ninguna desconfianza en términos de veto a personas”.
Celaá ha considerado que “despejarse a córner” los “debates estériles sobre cargos y personas”: “Hagamos primero el edificio, todo el mundo piensa primero en qué programa va a poner en marcha”. “¿Quién empieza negociando por los nombres del Consejo de Ministros? ¿En qué lugar del mundo? ¿Dónde? Hay que saber qué vamos a hacer”, ha expresado la ministra.
El retorno a la “casilla de salida” supone comenzar a trabajar en un programa con Unidas Podemos, pero también que “todos los escenarios” estén abiertos. “Valorar todos los escenarios es valorar todos los escenarios y entra también que las cuatro formaciones no bloqueen este país”, ha dicho en referencia a la posible abstención de PP, Ciudadanos y el grupo confederal para evitar el bloqueo.
No obstante, la novedad adelantada por eldiario.es es que Sánchez está dispuesto ahora a incorporar a su gabinete dirigentes de Unidas Podemos expertos o profesionales en materias relacionadas con ministerios técnicos. “Quien tiene la facultad de configurar su Gobierno es el presidente. Él determinará qué personas son de su confianza para llevar qué tareas”, ha expresado Celaá.
La portavoz ha defendido el “ejercicio de responsabilidad” que llevó a cabo, a su juicio, Sánchez al telefonear a Iglesias para proponerle que ambos aparquen sus posiciones de partida -los socialistas un Gobierno de cooperación con Unidas Podemos en escalones secundarios de la Administración- e Iglesias el de una coalición-, pero que no produjo ningún avance. “Aunque la conversación no dio los frutos esperados, Pedro Sánchez lo seguirá intentando”, ha rematado. Fuentes de Moncloa expresan que la próxima semana habrá “algún movimiento” del candidato a la investidura.
Aunque Celaá ha negado que la convocatoria de una consulta a los inscritos por parte de Podemos “dinamite” las posibilidades de un entendimiento antes del 22 de julio, fecha en la que comienza la investidura, ha dejado claro que no tiene ninguna esperanza en que el resultado les favorezca: “Todos podemos prever por dónde va a ir la respuesta tras la lectura de las preguntas”.