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Podemos marca distancias con el Gobierno ante el posible adelanto electoral

Pablo Iglesias pregunta a Pedro Sánchez durante la primera sesión de control del nuevo Gobierno.

Aitor Riveiro

Podemos no quiere un adelanto electoral. Pero menos aún quiere estar al albur del escenario que contempla Pedro Sánchez, ratificando en el Congreso reales decretos que se habrán aprobado previamente en el Consejo de Ministras mientras se evapora el acuerdo presupuestario que tanto esfuerzo les supuso. Podemos dejará de explicar ese pacto por toda España. Pablo Iglesias ha anulado la ruta La mitad del camino. Hacia un nuevo país, según han confirmado a eldiario.es fuentes de la dirección. Además, el secretario general ha convocado un Consejo Ciudadano extraordinario para este viernes para fijar una nueva hoja de ruta del partido.

Los vaivenes del Gobierno y del PSOE ante la duración de la presente legislatura han minado la confianza de Podemos hacia su socio. El partido considera que su líder se ha esforzado más que nadie en intentar recabar los apoyos necesarios para sacar adelante los Presupuestos Generales del año que viene.

“La historia se repite. El PSOE no tiene muchas ganas de sacar los Presupuestos y hay muchas voces que dicen que no dan los números. De nuevo es Unidos Podemos el grupo que más trabaja para sacar unos Presupuestos que mejorarían sensiblemente las condiciones de vida materiales”, aseguraba este lunes el portavoz de la ejecutiva, Pablo Echenique, en declaraciones a los medios.

Un empeño en el que Podemos todavía está, según explicaba este lunes pero que el Ejecutivo de Sánchez parece haber descartado del todo. En el Palacio de la Moncloa han tirado la toalla con las Cuentas de 2019. El plan del PSOE es gobernar a base de reales decretos con los Presupuestos del PP prorrogados. Y ya han comenzado los bailes de cifras, con el propio Sánchez dejando en el aire todas las opciones.

La decisión política de Podemos es la de apoyar aquellos reales decretos que “mejoren las condiciones materiales de vida de la gente”, en palabras de Echenique. Si el Gobierno aprueba un salario mínimo de 900 euros, tal y como recoge su acuerdo con Unidos Podemos, los 67 diputados del grupo confederal lo ratificarán. “No hacemos tacticismo político”, explicaba ante los periodistas el secretario de Organización de Podemos.

Con todo, el escenario ha cambiado. Y Podemos quiere prepararse para la nueva situación. Tras unos meses de aparente calma y ciertas certezas, la volatilidad se vuelve a apoderar de la vida política española.

El Consejo de Coordinación de Podemos ha tomado así dos decisiones. La primera, a instancias de Pablo Iglesias, convocar de forma extraordinaria el Consejo Ciudadano Estatal del partido. Estatutariamente, es el principal órgano de toma de decisiones entre asambleas. Y la de este viernes será la primera reunión no ordinaria que celebra en mucho tiempo.

El órgano escuchará primero un informe público de Iglesias. Y después, ya a puerta cerrada, debatirá la estrategia a seguir en los próximos meses.

La segunda decisión todavía no se ha comunicado. Pero eldiario.es ha confirmado que la dirección ha decidido cancelar un ciclo de actos con algunos de sus principales dirigentes para explicar y publicitar por toda España el acuerdo presupuestario del pasado 11 de octubre. Uno de esos actos, celebrado la semana pasada en Sevilla, volvió a juntar en un escenario a Iglesias y a Teresa Rodríguez justo antes de lanzarse la campaña de las andaluzas.

Fuentes de la dirección de Podemos aseguran que “el Gobierno de Pedro Sánchez está lanzando el mensaje de que puede haber adelanto electoral y que no van a traer los Presupuestos al Congreso”. Y zanjan: “Esto hace que tengamos que parar y diseñar una hoja de ruta acorde a ese nuevo escenario que está planteando el Gobierno y que no es el que nosotros preferimos”. De los 10 actos previstos, apenas se han celebrado cuatro.

El principal aliado de Podemos, Izquierda Unida, ha hecho un análisis similar. Su líder, Alberto Garzón, acusó este fin de semana al PSOE de no querer “aprobar los Presupuestos Generales del Estado”. “Ni siquiera se ha reunido con otros potenciales aliados para superar este trámite parlamentario”, aseguraba Garzón en su informe ante la Coordinadora Federal. El líder de IU cree que “la hoja de ruta del PSOE podría pasar por prorrogar una vez más los presupuestos antisociales del anterior Gobierno del PP” para después utilizar los reales decretos como arma electoral a su antojo.

Por eso, desde IU exigen al Gobierno llevar el proyecto de Presupuestos al Congreso o convocar elecciones.

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