Sánchez quiere una reunión solo con Torra pero no le impone “censura previa” a los temas
Pedro Sánchez quiere una reunión a solas con Quim Torra la próxima semana coincidiendo con el Consejo de Ministras del próximo viernes en Barcelona. El Gobierno descarta cualquier otro formato, como el que pretendía la Generalitat de un encuentro de ejecutivos al completo o la posibilidad de que asistan también la vicepresidenta, algún ministro y varios consellers. Lo que no le impone Moncloa es “censura previa” para una reunión que el Govern aún no ha confirmado.
El president de la Generalitat podrá abordar cualquier asunto con Sánchez, según ha reconocido la portavoz del Consejo de Ministras, Isabel Celaá: “Cuando el president Torra visito Moncloa, nadie hizo una delimitación de posibilidades de temas que él pudiera tocar. No hay censura previa”.
Torra podrá plantear el derecho a la autodeterminación, como también hizo el Govern en la primera reunión de la Comisión Bilateral del 1 de agosto, pero Sánchez lo rechazará, como en otras ocasiones: “El presidente del Gobierno hablará sobre lo que es el encauzamiento del conflicto para Catalunya, que no es otro sino diálogo dentro de la Constitución”, ha aseverado Celaá.
En una rueda de prensa posterior en Bruselas, Sánchez ha reconocido que, de producirse finalmente el encuentro, Torra “querrá hablar de autodeterminación”, pero ha recordado que el marco debe estar “dentro de la Constitución”. Además, ha asegurado que el tiempo que el president se dedique a hablar de esa cuestión, él lo dedicará “a hablar de la precariedad, calidad de servicios públicos y a ver cómo podemos reconstruir el estado de bienestar que en estos años de crisis” se ha visto debilitado en Catalunya.
Una de las condiciones de Torra para su encuentro con Sánchez es que se aborden los “temas a fondo”, es decir, la cuestión independentista. “Si no se está en disposición de abordar los temas a fondo, no hay que hacer reunión. Para hablar de las Cercanías ya tenemos una bilateral”, señalan desde el Govern. Moncloa no pone impedimentos.
Lo que rechaza el Gobierno es una reunión que vaya más allá de una reunión a dos, como hizo Pedro Sánchez con Susana Díaz cuando el Consejo de Ministras se celebró en Sevilla el pasado mes de octubre. “El formato que avala el Gobierno es la reunión entre los dos presidentes y ninguna otra”, ha expresado Celaá.
“Corresponde al anfitrión comportarse según los usos y costumbres y el presidente ha dicho que hay oportunidad de reunirse con el presidente, pero esto no es una cumbre”, ha sentenciado la portavoz.
Sánchez ha admitido que aún no tiene respuesta de Torra, aunque el president catalán le emplazó hace unos meses a reeditar su encuentro en Moncloa en Catalunya: “Espero que se produzca. En política lo que no se puede es perder las formas”, ha expresado antes de asegurar que su Gobierno “cumple” y que él plantea esa reunión para “hablar de las cosas que interesan a los catalanes”.
Descartado por ahora tomar el control de los mossos
En el Gobierno existe preocupación por los posibles disturbios que puedan producirse durante la presencia de Sánchez y su gabinete ante las movilizaciones anunciadas por grupos independentistas, entre ellos los Comités de Defensa de la República.
No obstante, Celaá ha mostrado su “confianza en que los mossos cumplan con su deber profesional” de asegurar las garantías de normalidad para el Consejo de Ministras. “El propio Govern ha reafirmado su compromiso con la seguridad ciudadana de todos los catalanes y con la oportunidad del Consejo de Ministras”.
“Su contestación fue la de máxima normalidad”, ha afirmado la portavoz sobre las cartas con las que la Generalitat respondió a la amenaza del Ejecutivo ante la “inacción de los mossos” durante las protestas de los CDR la semana pasada. Sobre el envío de agentes de la Policía Nacional o la Guardia Civil el próximo viernes para reforzar la seguridad, Celaá ha asegurado que aún no está cerrado el dispositivo.
Lo que sí ha rechazado es que por ahora el Gobierno pretenda asumir el control de los mossos: “Hasta ahora, con lo que estamos viviendo, está absolutamente descartado”, ha zanjado.