Alberto Rodríguez no presentará una querella contra Batet tras la retirada de su acta de diputado
El exdiputado de Unidas Podemos Alberto Rodríguez no presentará una querella por prevaricación contra la presidenta del Congreso, Meritxell Batet, después de que esta le retirase el acta de diputado el pasado viernes, confirman a elDiario.es fuentes de la defensa de Rodríguez. La decisión corresponde a una nueva estrategia judicial. Batet tomó la decisión de suspender su condición de diputado después del escrito enviado el mismo día por el presidente de la Sala Segunda del Supremo, Manuel Marchena, recordándole que Rodríguez había sido condenado a pena de cárcel e inhabilitación de sufragio pasivo. Tras la decisión de la presidenta, Unidas Podemos anunció una querella contra ella por prevaricación.
Batet tomó la decisión tras un informe contrario de los letrados del Congreso, que avalaron que el exdiputado canario podía mantener su acta porque su condena de cárcel fue sustituida por una multa y porque su condena de inhabilitación se refiere al sufragio pasivo y no a poder ejercer un cargo público. Entendían que no podía presentarse a unas elecciones en 45 días pero que puede seguir en el Congreso.
Rodríguez califica la decisión de Batet de “unilateral” y considera que “atribuyéndose competencias que no tiene, procedió a modificar la sentencia y acordar que se me retira el acta de diputado”.
El ex diputado ha informado en un comunicado de la contratación de los abogados Isabel Elbal y Gonzalo Boye para preparar el recurso a su condena por agresión a un agente policial y para las “eventuales acciones judiciales necesitadas de amparo que se deben adoptar ante la decisión de la Excelentísima Señora Dª Meritxell Batet para que sea juzgada tal decisión por atentar contra los principios más básicos de la soberanía popular”.
Alberto Rodríguez informa de que ya ha hecho efectiva su baja en Podemos, tal y como anunció este sábado a última hora, y su renuncia a la participación en estructuras de partidos estatales en el ámbito canario, tras comprobar “los límites de las mismas desde una perspectiva archipielágica autocentrada”.
En el escrito insiste además en proclamar su inocencia, en denunciar las irregularidades que, en su opinión, se han sucedido en la causa judicial en su contra, y en afirmar que “el cierre de un ciclo no implica que la batalla haya terminado. Esto no ha hecho más que empezar. Canarias es tierra de brega, aquí no se rinde nadie”.
66