Nuevo encontronazo entre la Asamblea de la Huelga Feminista y el alcalde de Valladolid

La 'no detención' de tres mujeres de la Asamblea de la Huelga feminista en Valladolid, que acabaron en comisaría por pegar carteles, ha provocado que el alcalde Óscar Puente haya tenido que dar explicaciones este viernes en una rueda de prensa. Su versión de los hechos difiere de las de las tres afectadas, ya que el regidor asegura que se trasladó a comisaría a dos mujeres “a efectos de identificación” y a una tercera “como acompañante”. Según la Policía Municipal, se habían negado a identificarse, cosa que la Asamblea de la Huelga ha negado tajantemente a eldiario.es.

Puente reconoce sin embargo que los agentes no interpretaron correctamente la ordenanza de convivencia ciudadana aprobada por su antecesor, Javier León de la Riva. Según explicó, los policías consideraron que estaban pegando los carteles sin permiso, por lo que quisieron levantar un acta. Según la versión policial, ellas se negaron a aportar su documentación. Esa es, según Puente, la razón por la que se les conduce a comisaría. “Si a una persona se le solicita la documentación para levantar un acta y no la aporta, se le conduce a comisaría”, aseguró.

El alcalde también matizó que dos se negaron a hacerlo y una tercera sí que se identificó, aunque fue trasladada en un vehículo policial “como acompañante”. Lo cierto es que en la ronda de preguntas posterior, Puente no pudo explicar por qué se lleva a una tercera “como acompañante”, algo nada frecuente, por qué después de, supuestamente, negarse, facilitan sus datos en comisaría, y por qué a las tres y no a dos, se les entrega el acta en la sede policial.

A preguntas de este diario, sobre una posible investigación interna de los hechos para aclarar las contradicciones, Puente comentó que no se atrevía a asegurar que se haría una “investigación formal” pero que sí se intentaría resolver las dudas.

A pesar de las circunstancias en las que produjeron los hechos, el alcalde aclaró que la apertura de un acta no supone que haya una sanción, algo que determinará el instructor. Lo que no defendió fueron los motivos: “No estamos de acuerdo con la interpretación de la norma que hicieron los agentes. Hemos enviado  una instrucción a la Policía Municipal basada en una sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León de 8 de octubre de 201”, afirmó.

El fallo se pronuncia sobre el alcance del artículo 5 de la Ordenanza de Convivencia Ciudadana que establece que en el caso de pegada de carteles de índole político, debe prevalecer la libertad de expresión. Así, el artículo prohíbe aquellas actuaciones con publicidad política o comercial que destruyan o deterioren bienes municipales o de terceros pero no no prohíbe “cualquier forma de expresión política, vecinal ideológica o social que incida en esos bienes”. El alcalde recalcó “incidir, no deteriorar”.

Su conclusión, por tanto, es que la pegada de carteles que hacían las mujeres no es punible porque “la preeminencia de la libertad de expresión” las legítima. Puente añadió que esperaba que situaciones así no vuelvan a producirse y quiso remarcar su apoyo a la huelga subrayando que el equipo de Gobierno, PSOE  e IU Valladolid Toma La Palabra así como Valladolid Sí Se Puede, que les apoya, son “convocantes de la huelga” y participaran en actos previstos ese día: “No somos un gobierno represor, como ha dicho la Asamblea”.

La situación se desbordó, porque precisamente una integrante de esta estaba presente en la sala, y se dirigió a Puente para reprocharle sus palabras: “Ustedes no convocan la huelga ¿desde cuándo un partido político convoca huelgas? La convocatoria la hacen sindicatos como CGT y CNT, mientras que UGT o CCOO plantean paros de dos horas por turno. Atreverse a decir eso, nos parece osado, por no decir cínico”. Puente contestó que estaba en el deber de desmentir las manifestaciones hechas por la Asamblea en la que se tildaba al Ayuntamiento de represor y de estar en contra de la huelga. “Eso es una falacia”, aseguró a la vez que recordaba que el secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, apoyaba la causa.

“La detención fue represora, a las compañeras no las identificaron, las dirigieron directamente al coche y a la comisaría, sin oportunidad ni siquiera de dialogar”, respondió la aludida. Puente, que le recordó que estaba en una rueda de prensa,  la remitió a los reglamentos, a disposición de los administrados, al tiempo que la mujer emplazaba a los periodistas allí presentes a acudir a la concentración protesta frente al Ayuntamiento convocada a las 18.30 horas de hoy.

Mientras abandonaba la sala, el alcalde se defendió de las acusaciones de represión, recordándole que le había permitido acceder a la rueda de prensa e interpelarle. “Luego saldrás a la calle a llamarme represor”, lamentó.