El apoyo personal de Casado y Aznar salva a Álvarez de Toledo pese al enorme enfado de la mayoría de la cúpula del PP
El líder del Partido Popular, Pablo Casado, mantendrá a Cayetana Álvarez de Toledo como portavoz en el Congreso de los Diputados, uno de los puestos de mayor relevancia y exposición pública, pese a que la también diputada por Barcelona ha generado esta semana una nueva tormenta interna con sus declaraciones contra los medios y el feminismo.
Distintas fuentes del PP reconocen que el enfado con la diputada por Barcelona es enorme en Génova 13 y, sobre todo, entre los dirigentes de la cúpula popular más cercanos a Casado, los de su total confianza en el Comité de Dirección. Pero el máximo líder de los populares, aconsejado por su padrino político, el expresidente del Gobierno José María Aznar, muy cercano a Álvarez de Toledo, no piensa dejar caer aún a la que es una de sus principales apuestas personales.
“Es una extraordinaria portavoz en el Congreso. A todos los partidos les gustaría tener a Cayetana como portavoz. Es una persona que siempre ha decidido ser libre, independientemente de dónde haya nacido”, aseguraba este viernes Casado, tratando de zanjar la polémica. Lo hacía, precisamente, en un acto del PP en Madrid con motivo del 8M celebrado bajo el lema 'Mujer por encima de todo'.
El líder de los populares se mostraba así “orgulloso” de que, como hace Álvarez de Toledo, se den “batallas ideológicas sin complejos pero sin levantar el tono”. “La coherencia en la vida es una extraordinaria cualidad”, añadía Casado, que hasta este viernes se había mantenido en silencio sobre las polémicas generadas por su portavoz parlamentaria.
El enfrentamiento con Atresmedia y Camille Paglia
Su determinación de mantener a la polémica parlamentaria al frente del Grupo Popular es firme, según reconocen las fuentes consultadas, pese a las salidas de tono más recientes de la portavoz del PP en el Congreso. El lunes cargó contra La Sexta, a la que acusó de “hacer negocio con la erosión de la democracia”, durante una entrevista en Onda Cero en la que contraprogramó al propio Casado, que estaba siendo también entrevistado en Telecinco.
El martes, la también periodista dirigió sus dardos contra la prensa, esta vez sin un destinatario claro. “Hay medios que hacen negocio a costa de la democracia y hay medios que promueven o participan de las mentiras populistas y nacionalistas a costa de la democracia”, dijo. Todo ello ha generado un fuerte malestar en Génova 13, que no quiere verse enfrentado a un grupo mediático tan importante como Atresmedia, del que forman parte, además de La Sexta, Antena 3 u Onda Cero, a las puertas de una campaña electoral por los comicios del 5 de abril en Euskadi y Galicia.
El enfado de la cúpula popular se agravaba ese mismo martes por las descalificaciones hacia el movimiento feminista vertidas por Álvarez de Toledo en la rueda de prensa posterior a la Junta de Portavoces del Congreso. Frente al sector más moderado del PP, que se declara abiertamente “feminista” y defiende la presencia del partido en las marchas del 8M, la portavoz popular se identificó como una “feminista amazónica de la escuela de Camille Paglia”, una escritora y profesora norteamericana que, por ejemplo, considera que “sin el hombre la mujer nunca hubiera salido de la cueva”.
Álvarez de Toledo recalcó además que no acudirá a la manifestación del 8M, en un claro desmarque de la dirección de su partido que tras constatar el éxito sin precedentes del año pasado sí quiere apuntarse ahora a las marchas aunque con un lema propio, 'Mujer por encima de todo'.
Contra la “ideología machista”
La portavoz parlamentaria del PP también aseguró que las mujeres “no son víctimas”, pese a los asesinatos contabilizados en España: 1.047 desde 2003, cuando se empezaron a contar las cifras, y 14 solo en lo que va de 2020. y se erigió como una negacionista de la “ideología machista” en la misma línea de la extrema derecha de Vox, asegurando que las mujeres en España “nacen libres” y sin ningún tipo de discriminación.
A última hora del miércoles, otras polémicas declaraciones de Álvarez de Toledo volvían a remover las aguas en Génova 13. Durante su intervención en un acto de la revista Yo Dona, se refirió al vicepresidente del Gobierno Pablo Iglesias y la ministra de Igualdad, Irene Montero, en los siguientes términos: “Si yo fuera ministra de igualdad y mi marido saliera cual macho alfa a defender a su hembra de un colega de un ministerio lo mandaría al sofá. No me puedo imaginar mayor humillación, condescendencia y machismo. (...) La señora Montero es la mujer más humillada de la política española”.
Pese a la polémica interna generada por la portavoz popular en el Congreso, que ha forzado a numerosos dirigentes populares a desmarcarse de las declaraciones de Álvarez de Toledo sobre los medios y la igualdad, Casado optó por el silencio hasta el mismo viernes. El líder del PP respaldó entonces a una de sus grandes apuestas políticas, a la que nombró portavoz en julio con los principales barones en contra.
El presidente de la Xunta de Galicia y candidato a la reelección, Alberto Núñez Feijóo, o el presidente de la Junta de Andalucía, Juan Manuel Moreno Bonilla, le pidieron expresamente que renunciara a ese nombramiento durante la convulsa comida que mantuvieron con el líder del PP el 27 de mayo en Madrid, tan solo un día después de las elecciones autonómicas y municipales. Pero Casado, aconsejado principalmente por Aznar –presidente de la fundación FAES a la que está especialmente unida Álvarez de Toledo– la eligió como portavoz parlamentaria.
En la misma línea de esa polémica comida, ahora Feijóo quiere evitar la presencia de Álvarez de Toledo en la campaña del 5A en la que trata de desmarcarse de la dirección de su partido, e incluso de las siglas, para marcar un perfil propio, más moderado, que le permita atraer a más votantes.
Cerrojazo a las preguntas de la prensa
El líder popular que durante los últimos meses se había caracterizado por su híper presencia mediática y por comparecer casi cada día ante la prensa, ha decidido ahora no responder a los medios. Pese a convocar a la prensa, Casado no aceptó preguntas el martes durante su visita al colegio concertado y religioso San Alfonso, en el barrio de Lavapiés de Madrid. Tampoco dejó preguntar a los periodistas este jueves, durante su visita a la planta de Alcoa de Lugo. Ni tras el acto del viernes por el 8M.
El entorno de la portavoz del PP en el Congreso reconocía en las últimas semanas que, a nivel interno, ella únicamente se siente respaldada por Casado, dejando en evidencia así las fuertes discrepancias que existen entre Álvarez de Toledo y los otros dos puntales de la cúpula popular: el secretario general, Teodoro García Egea, y el vicesecretario de Comunicación, Pablo Montesinos.
Las fuentes del partido consultadas por eldiario.es recalcan que la brecha con esos dos dirigentes no ha hecho más que profundizarse en los últimos días en los que la portavoz parlamentaria ha vuelto a hacer gala de su independencia interna al hablar tanto de la prensa como sobre el feminismo, en una semana, la del 8M, en la que el PP pretendía reconciliarse con el movimiento feminista queriendo acudir a las marchas del próximo fin de semana para diferenciar su discurso del de Vox.
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