El presidente del Partido Popular, Pablo Casado, está preparado para pactar con Vox tras los resultados de las elecciones municipales, autonómicas y europeas de este domingo que les permitirán gobernar en ayuntamientos y comunidades con la ayuda de la formación extremista y Ciudadanos. De hecho, Casado ha realizado un nuevo viraje en su estrategia evitando llamar a la formación de Santiago Abascal de “extrema derecha”.
Aunque el líder del PP sí utilizó esa calificación por primera vez el pasado 30 de abril tras la derrota de las generales, en lo que se interpretó como un giro al centro, este lunes Casado ha preferido no calificar a la que es su potencial socia en los próximos meses en administraciones locales y regionales. “La definición que yo he hecho de Vox es la que ellos han hecho: se han situado a la derecha del PP y eso no es peyorativo”, se ha limitado a señalar en rueda de prensa, tras la reunión del Comité Ejecutivo Nacional del partido.
En opinión de Casado este domingo “acabó un ciclo político”. Desde 2011, ha recordado, el PP ha tenido “un declive”, pero por primera vez este 26M ha sido “el único partido” que ha crecido “respecto al mes pasado”. “Hay una recuperación, ha empezado la remontada. Hoy empieza todo”, ha proclamado el líder de los populares.
“Desde el congreso nacional hay una recuperación electoral en el partido aunque es claramente insuficiente”, ha reconocido. En todo caso, Casado ha considerado que las “razones” por las que el electorado ha cambiado de partido, votando a Ciudadanos o Vox “no son imputables” a su dirección. “Tenemos unos puntos débiles que tenemos que reforzar, como los casos pasados de corrupción, la gestión de la crisis territorial en España o la crisis económica”.
Este lunes comienza, a su juicio, “la refundación del centro derecha, la reconstrucción de nuestro espacio electoral”. “El ciclo electoral nos permite un plazo de cuatro años para apuntalar esa recuperación. Lo hacemos desde la humildad. O se refunda el espacio electoral del centro derecha o no ganaremos las elecciones que vengan por delante”, ha zanjado.
Casado ha negado que este mejor resultado el 26M se haya debido a un giro al centro, tal y como han reivindicado algunos de los principales barones como los presidentes de Galicia y Andalucía, Alberto Núñez Feijóo y Juan Manuel Moreno Bonilla, respectivamente, que este mismo lunes pedían que el partido mantuviera esa estrategia. “No ha habido ningún viraje” ha insistido el líder del PP.
En la rueda de prensa posterior al Comité Ejecutivo del PP, Casado ha explicado que será la Junta Directiva Nacional –máximo órgano entre congresos del partido– el que en una próxima reunión decida la nueva organización de los grupos parlamentarios y, por tanto, quiénes serán los nuevos portavoces. De momento José Antonio Bermúdez de Castro ejercerá de portavoz en funciones en el Congreso e Ignació Cosidó en el Senado.