Varias decenas de personas se han concentrado este jueves frente a la sede estatal del PSOE de la calle de Ferraz de Madrid con el objetivo de “presionar” al principal partido del Gobierno para que se apruebe “la Ley de Vivienda que garantice su derecho y ponga límites a la especulación”. La normativa sigue siendo una de las principales zonas de fricción dentro del Ejecutivo, entre PSOE y Unidas Podemos, sobre todo en lo referido a establecer límites a los precios de los alquileres. Esas discrepancias han ido retrasando la aprobación de la ley, recogida como uno de los compromisos de la legislatura en el acuerdo de coalición de las dos fuerzas. No obstante, ambas partes confían en llegar a un acuerdo en los próximos meses.
La protesta de este jueves, a la que han asistido unas 50 personas, ha consistido en la colocación de unas 20 construcciones de cartón simulando casas a lo largo de la acera que se sitúa frente a la sede del PSOE. La movilización ha estado respaldada principalmente por la Coordinadora de Vivienda de Madrid y Amnistía Internacional, aunque también por otras organizaciones dedicadas a la lucha por el derecho a la vivienda.
“Venimos a la puerta del PSOE para exigirle que desatasque la negociación de la Ley de Vivienda”, afirma Laura Barrio, de la Coordinadora. Ella considera que el texto planteado por los socialistas, que no contempla límites concretos a los precios de los alquileres, “es completamente inútil y va a dejar desatendida a la mayor parte de la clase media y trabajadora”. En su opinión, de salir adelante esa propuesta, seguirían produciéndose desahucios. A los socialistas les ha pedido que les escuchen y aunque ha reconocido que la protesta forma parte de la ironía, ve un riesgo real de que la población acabe “viviendo en casas de cartón”.
Alberto Astarloa, activista de Amnistía Internacional, señala que la de este jueves es una protesta que busca una “Ley de Vivienda garantista para los derechos humanos”. Él reclama una “mayor protección para las personas que van a ser desahuciadas” para que se les ofrezca una “alternativa habitacional”, así como la regulación del precio de la vivienda en “zonas tensionadas” o que la oferta de parque de vivienda pública en España se pueda ampliar para equiparar la situación a la de otros países europeos.
Algunos protagonistas de la película de Botto
En Ferraz ha estado presente, también, la película 'En los márgenes' dirigida por Juan Diego Botto y producida por Penélope Cruz, que aborda precisamente el drama de los desahucios y los problemas de la vivienda en España. Uno de los personajes del filme es Richard Rodríguez, de la Asamblea de la Plataforma Antidesahucios (PAH) de Usera, que lamenta que el Gobierno esté “tardando en activar la Ley de Vivienda”. “Las familias se quedan en la calle sin alternativa habitacional y eso en un Estado de derecho no se puede consentir”, ha añadido. Él sufrió en sus propias carnes las consecuencias de la situación actual ya que, junto a su mujer, al no poder pagar el alquiler de 550 euros que le costaba su piso de Vallecas, dejó la vivienda y decidió ocupar otra propiedad de los bancos que estaba vacía, que posteriormente ha sido vendida a un fondo buitre, desde donde lucha por un alquiler social.
Además, también en la puerta de Ferraz, Asunción Carbonell, activista de la Plataforma Antidesahucios (PAH) de Villaverde, que también participa en la película de botto, recordaba que lleva 10 años “luchando por una vivienda digna”. “Soy mayor y estoy enferma y ya es hora de que me den una vivienda digna”, ha añadido. “El PSOE siempre nos rechaza la ley de Vivienda y tiene que entender nuestra protesta”, asegura.