Cospedal defiende el adoctrinamiento en las escuelas que considera la inmigración como un riesgo
Aprender el pasodoble La banderita o el himno de la Armada, así como asumir “el deber de defender a España”, saber dibujar el el escudo y la bandera españolas o considerar la inmigración como un riesgo para la seguridad nacional. Eso es lo que el Gobierno pretende que hagan los niños de entre 6 y 12 años y así lo ha defendido este martes la ministra de Defensa, María Dolores de Cospedal, durante la session de control al Ejecutivo que ha tenido lugar en el Senado.
La también secretaria general del PP ha reivindicado así el acuerdo firmado entre su departamento y el de Educación para incluir contenido en el currículum educativo sobre los símbolos nacionales y las Fuerzas Armadas. Según ha explicado, su ministerio “tiene como objetivo y como obligación promover el desarrollo de la cultura de Defensa” y, por ello, “tiene la obligación de que se conozca, se valore, y de esta manera se puedan entender mejor los esfuerzos solidarios y efectivos que realizan los integrantes de las Fuerzas Armadas”.
Según ha señalado, el objetivo del temario aprobado es permitir que los jóvenes “puedan conocer los valores, los principios y todo aquello que realizan las Fuerzas Armadas en defensa de su país”. Y se ha preguntado: “¿Por qué va a ser malo que se eduque a nuestros chicos en los valores que son propios de las Fuerzas Armadas como la solidaridad, la defensa de su país, el espíritu de equipo, el trabajo de equipo, la responsabilidad por lo que hace cada uno o la defensa de los valores constitucionales?”
Cospedal respondía así a la pregunta que le habían formulado al respecto tanto la senadora de Podemos Sara Vilà como la del PSOE Begoña Nasarre. Ambas habían considerado que la iniciativa de Defensa y Educación buscaba más la “adoctrinación” de los menores y el ensalzamiento del “patriotismo” y del “sentimiento nacional” que el conocimiento de la labor de las Fuerzas Armadas.
No obstante, Cospedal ha insistido en la defensa del temario aprobado por su departamento al considerar que “la cultura de Defensa ha estado demasiado acotada a centros insertados en las Fuerzas Armadas”. Y que, por ello, el objetivo de la iniciativa es “que salga de ese espectro y que nuestros niñas conozcan lo que hacen los militares en defensa de sus derechos”.
La ministra de Defensa ha asegurado que “a lo largo de diez unidades didácticas se enseña a los más jóvenes cuestiones tales como nuestros principios democráticos, los símbolos nacionales, como la protección de las libertades públicas, o cómo son nuestras fuerzas armadas que no molesta saberlo”. Pero también ha reconocido que se incluye a la inmigración como uno de los riesgos para la seguridad española. En concreto, el texto señala que “los flujos migratorios se han transformado en un fenómeno con implicaciones para la política de seguridad”.
Según Cospedal esos “movimientos de inmigraciones irregulares” tienen que ver con “los retos del futuro”. “Es un hecho que de verdad existe y los más jóvenes tienen derecho a conocerlo”, ha zanjado.
