Casi cuatro años después, la renovación del Consejo General del Poder Judicial sigue estancada. Y en una peor situación tras la dimisión del presidente del organismo, Carlos Lesmes. Ante la “grave crisis institucional” que se vive, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y el líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, se han reunido durante más de tres horas en el Palacio de la Moncloa, acompañados de sus principales negociadores. Pero no se ha cerrado un acuerdo, aunque sí se ha “avanzado” en un pacto, tal y como han apuntado ambas partes. “La principal conclusión ha sido que el presidente del Gobierno y el líder de la oposición han acordado dar un último intento a la negociación para dar una solución rápida al bloqueo del Consejo General del Poder Judicial y el Tribunal Constitucional”, ha aseverado el ministro de Presidencia, Félix Bolaños, presente en la cita y quien pilotará ahora las conversaciones con el interlocutor del PP, Esteban González-Pons.
“Tanto el presidente del Gobierno como el líder de la oposición han coincidido en definir como muy grave la situación en que está sumido el Poder Judicial. Desde esta base nos comprometemos a negociar, ojalá en serio, ahora ya en serio, para lo antes posible tener un acuerdo”, ha agregado en una rueda de prensa Bolaños, acostumbrado a que las negociaciones con el PP salten por los aires. A pesar de los precedentes, ha asegurado que “la voluntad del Gobierno es llegar a un acuerdo lo antes posible”. No obstante, Bolaños ha reconocido que no se han puesto “ningún plazo concreto de días” para desbloquear el Poder Judicial. “La voluntad es compartida de llegar a un acuerdo lo antes posible”, ha rematado.
“Hemos avanzado para abordar la renovación conjunta de CGPJ y TC con un nuevo marco que profundice en criterios de independencia. Creo que este paso se podía haber dado mucho antes, y confío en que también será posible una reforma legal como pide la UE y lleva pidiendo meses el PP”, había dicho previamente el presidente del PP en Twitter.
Pero las posiciones siguen “muy alejadas”, según ha dicho González Pons en una rueda de prensa en Génova, en la que ha matizado a su jefe de filas al apuntar que el “nuevo marco que profundice en criterios de independencia” no es algo que esté acordado con el Gobierno. Según el vicesecretario del PP, Feijóo se refiere a que vuelven las conversaciones entre unos y otros: “El diálogo y el espíritu constructivo ya es un nuevo marco”.
El principal escollo es la exigencia del PP de que los jueces elijan de manera directa a la mayoría de su órgano de gobierno. La idea de la dirección de Feijóo es renovar el CGPJ ahora con garantías de que en el futuro se cambiará la fórmula, pero también que dichos nuevos criterios se implementen desde ya, cuando la posición de la derecha es minoritaria en las Cortes Generales, lo que le dará un peso menor en el Poder Judicial.
El PSOE siempre se ha opuesto a cambiar el sistema al entender que con el modelo vigente desde hace tres décadas la carrera judicial propone nombres y las Cortes Generales, con mayoría de tres quintos, eligen los vocales de esa preselección.
En la rueda de prensa, Bolaños no ha cerrado claramente esa puerta en esta ocasión, aunque sí ha deslizado la negativa al responder a los periodistas que “conocen las distintas posiciones” al respecto. “Permítanme que seamos discretos, que trabajemos con intensidad, que lo hagamos con discreción y cuando haya acuerdos para comunicar a la opinión pública así lo haremos y serán ustedes convocados para darles precisa información de lo que se pacte”, ha contestado a la pregunta concreta de si el Gobierno aceptaría modificar el sistema, que es lo que ha sugerido antes el líder conservador.
Bolaños ha explicado que ha telefoneado a la vicepresidenta segunda, Yolanda Díaz, tras la reunión con Feijóo para informarle del contenido de la misma y para “estar perfectamente coordinados en esta negociación” que ahora se abre. Podemos había exigido minutos antes, cuando aún estaba el presidente reunido con el líder del PP, formar parte de la negociación. “La renovación no puede ser de PP y PSOE, eso es lo que quiere el PP. Debe ser una negociación de todo el Gobierno porque no es de recibo democrático excluir a Podemos de la composición de órganos constitucionales”, ha señalado el portavoz, Pablo Fernández, informa José Enrique Monrosi.