La propuesta de Mariano Rajoy de abrir el debate sobre el método de elección de los alcaldes y abordar la posible reducción del número de aforados ha provocado una oleada de críticas fuera del PP y de elogios dentro del partido. Mientras un gran número de ediles conservadores han aplaudido la idea de que gobierne el más votado, desde el resto de formaciones se desconfía de la medida y se atribuye al miedo a perder el poder municipales en las próximas elecciones de 2015. El vicesecretario de organización del PP, Carlos Floriano, niega que la propuesta obedezca al “cálculo electoral”.
Floriano, que ha inaugurado en Móstoles la segunda edición de la Escuela de Formación Política del PP, ha asegurado que todo obedece a una voluntad de regenerar la democracia y “mejorar las cosas”, pero no a cálculos electorales y que se podría hablar de un porcentaje mínimo : “Se trata de hablar, de buscar un debate, si hay alguien que está haciendo ya el cálculo electoral, pues será problema del que hace el cálculo electoral, no es nuestro caso”, ha afirmado Floriano. El dirigente del PP se ha referido a la necesidad de que “no se violente la voluntad de los ciudadanos cuando votan”.
Entre los socialistas, la idea no ha encontrado más que críticas y desconfianza. El candidato a la secretaría general del PSOE, Eduardo Madina, ha tildado de “poco serio” el planteamiento de Rajoy cuando sólo faltan seis meses para las municipales. “Creo que ante malas perspectivas electorales de un partido en las próximas municipales como le pasa al PP, pretender ahora una reforma unilateral de la ley electoral, como hizo Cospedal en Castilla La Mancha o ha valorado el presidente Feijóo en Galicia, no es una manera de afrontar bien las cosas que nos competen a todos los ciudadanos”, ha manifestado Madina en una entrevista en la Radio Galega, recogida por Europa Press.
Madina ha pedido “más tiempo y serenidad” para un debate como éste aunque se ha mostrado a favor de una reforma electoral. Así, ha recordado que su partido tiene “una posición fijada de reforma de la ley electoral” y defiende “un modelo similar que tiene Alemania con un sistema mixto que reconoce la pluralidad del país, que asegura la gobernabilidad de las instituciones”. “Lo que no vamos a hacer a seis meses de las municipales es pretender cambiar la manera en que se elige un alcalde porque a un partido le vaya mejor o a otro le vaya peor. Me parece poco serio por parte de Rajoy”, ha insistido.
El presidente de Ciutadans, Albert Rivera, ha tachado directamente la medida de “estafa democrática”. Desde los cursos de verano que organiza la Universidad Complutense en El Escorial, ha asegurado que una reforma en este sentido es para que tanto conservadores como socialistas “puedan blindar a sus alcaldes” y, además, no dejar entrar a “partidos nuevos o plataformas ciudadanas”. “Hay partidos que quieren agarrarse a un clavo ardiendo y encima decirle a los ciudadanos que es por su bien”, ha denunciado.
Rivera ha señalado que no hay que dedicar “ni un minuto” a lamentarse porque ha llegado el momento de “poner el hilo en la aguja”, porque “el mayor logro de los inmovilistas” ha sido hacer creer que no se pueden cambiar las cosas. En su opinión, el mapa político que se ha diseñado tras las elecciones europeas ha provocado “muchos nervios”.
El más entusiasta ha sido el ministro de Industria y presidente del PP de Canarias, José Manuel Soria, partidario de que en las instituciones gobierne “automáticamente” el cabeza de lista de la candidatura más votada. Soria ha admitido que eso comporta hacer “algunas modificaciones” para evitar episodios de inestabilidad. En una entrevista en RNE recogida por Europa Press, el ministro ha aludido al Gobierno regional de su comunidad donde Coalición Canaria no ha ganado las dos últimas elecciones y lleva gobernando las dos legislaturas: “Eso son distorsiones con las que sería bueno terminar, sobre todo porque cree que es la voluntad de la mayor parte de los ciudadanos”, ha dicho.
El presidente canario, Paulino Rivero, gobierna en las islas desde 2007, año en que el partido más votado fue el PSOE con Juan Fernando López Aguilar, pero no logró el gobierno porque CC pactó con el PP. En 2011 se dio la situación inversa, ya que el PP de Soria fue el más votado pero CC logró mantener el Gobierno pactando con el PSOE. Soria ha explicado que el modelo de que gobierne automáticamente el más votado ya existe en los cabildos insulares canarios, aunque con factores de inestabilidad. De hecho, ha recordado que él mismo accedió a la presidencia del cabildo grancanario en 2007 pero le hicieron una moción censura “al día siguiente”.
Soria niega que la propuesta de Rajoy para los municipios sea interesada y replica que “se propone para todos, no sólo para un partido”. En su opinión, si alguien se opone nada más plantearse el debate será porque prevé “no ganar las elecciones” y aun así intentar gobernar.
Desde Cataluña, el conseller de la Presidencia, Francesc Homs, también ha terciado en el debate y lo ha achacado al cálculo electoral: “Tengo la sensación de que han hecho números y están nerviosos porque pueden perder algunas situaciones”. Aunque se ha mostrado partidario de todo lo que pueda estar al servicio de una mejor estabilidad en las instituciones, Homs ha remarcado que la forma en que se ha planteado esta medida alimenta la sospecha de que se están defendiendo intereses “partidistas”.