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Opinión - Cada día un Vietnam. Por Esther Palomera

PSOE y PP retuercen el sistema de elección del Poder Judicial y hacen a Marchena presidente

La decisión de Gobierno y PP de anunciar el acuerdo para elegir al juez Manuel Marchena como nuevo presidente del Tribunal Supremo y del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) antes de que se hayan elegido los 20 vocales del órgano de gobierno de los jueces supone una nueva burla de socialistas y populares al procedimiento establecido por ley para renovar el organismo judicial.

La legislación española establece que la potestad para designar al presidente del CGPJ corresponde únicamente a esos 20 vocales que previamente deben ser nombrados por Congreso y Senado, y que los magistrados tienen que escoger a su máximo jefe durante el primer pleno de su mandato.

Al anunciar el nombre de Marchena antes incluso de la elección de los vocales, Gobierno y PP se saltan el trámite legal para adaptarlo a su reparto de poder. Los socialistas han aceptado la designación del magistrado conservador como presidente a cambio de escoger a once de los 20 miembros del CGPJ. Los populares han elegido los nombres de los nueve restantes.

Hace diez años, en 2008, PSOE y PP ya anunciaron su pacto para nombrar a Carlos Dívar como presidente del CGPJ antes de elegir a los vocales del órgano de gobierno de los jueces. El entonces presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, y el líder de la oposición, Mariano Rajoy, fueron entonces duramente criticados por las asociaciones judiciales. Como hace una década, esas mismas organizaciones también cargan ahora contra socialistas y populares por un pacto que, a su juicio, da una “mala imagen” de la justicia y genera “sombras” en la independencia judicial en España, en un momento en el que la credibilidad de los tribunales está en entredicho tras el escándalo del impuesto de las hipotecas.

El procedimiento de renovación del CGPJ está recogido en la Ley Orgánica 4/2013, de 28 de junio, de reforma del Consejo General del Poder Judicial que establece que los 20 vocales “serán designados por las Cortes Generales del modo establecido en la Constitución”. Cada una de las Cámaras –Congreso y Senado– “elegirá, por mayoría de tres quintos de sus miembros, a diez vocales, cuatro entre juristas de reconocida competencia con más de quince años de ejercicio en su profesión y seis correspondientes al turno judicial”.

Pueden ser elegidos por el turno de juristas “aquellos jueces o magistrados que no se encuentren en servicio activo en la carrera judicial y que cuenten con más de quince años de experiencia profesional, teniendo en cuenta para ello tanto la antigüedad en la carrera judicial como los años de experiencia en otras profesiones jurídicas”. 

En 2013 sí respetaron el procedimiento

La ley establece que el CGPJ se debe reformar en su totalidad cada cinco años, contados desde la fecha de su constitución y que “los presidentes del Congreso de los Diputados y del Senado deberán adoptar las medidas necesarias para que la renovación del Consejo se produzca en plazo”.

La última renovación se produjo en diciembre de 2013, cuando el Gobierno de Rajoy y el PSOE de Alfredo Pérez Rubalcaba acordaron la elección de los 20 vocales y, después, éstos eligieron a Carlos Lesmes como presidente, respetando en esa ocasión el procedimiento establecido. Como están a punto de cumplirse los cinco años de esos nombramientos, Gobierno y oposición están apurando los plazos para la nueva reforma, que deberá producirse en todo caso antes del mes de diciembre.

Las mesas de Congreso y Senado deberán convocar sendos plenos para votar a los candidatos presentados por los distintos grupos parlamentarios. Este lunes se registraban ocho de los nombres pactados por PP y PSOE –cuatro en la Cámara Baja y cuatro en la Cámara Alta–. 

Éstos y los aspirantes que ambas formaciones consensúen los próximos días lograrán previsiblemente al menos los votos de socialistas y populares en el Congreso –218 de 350 diputados– y en el Senado –209 de 266 senadores– por lo que serán designados vocales al superar la mayoría de tres quintos exigida por la legislación. Unidos Podemos también intenta pactar nombres con el PSOE y ya ha anunciado que no votará a favor de los candidatos propuestos por el PP. 

Sistema de dos vueltas

Respecto a la elección del presidente del CGPJ, la ley determina que “en la sesión constitutiva” del órgano de gobierno de los jueces, “que será presidida por el vocal de más edad, deberán presentarse y hacerse públicas las diferentes candidaturas, sin que cada vocal pueda proponer más de un nombre”. A continuación, “la elección tendrá lugar en una sesión a celebrar entre tres y siete días más tarde, siendo elegido quien en votación nominal obtenga el apoyo de la mayoría de tres quintos de los miembros del Pleno”.

“Si en una primera votación ninguno de los candidatos resultare elegido, se procederá inmediatamente a una segunda votación exclusivamente entre los dos candidatos más votados en aquélla, resultando elegido quien obtenga mayor número de votos”, concluye la normativa.