Mariano Rajoy ha renunciado a intentar ser elegido presidente del Gobierno en la primera sesión de investidura, según ha informado la Casa Real en un comunicado y ha confirmado el presidente en funciones en una comparecencia en Moncloa unos minutos después. “En este momento no estoy en condiciones -le ha dicho Rajoy al monarca-. No solo no tengo una mayoría de votos a favor sino que tengo una mayoría absoluta, acreditada, de votos en contra”, ha expresado.
El líder del PP ha dejado bien claro que su renuncia se limita a este primer intento, pero que no descarta tratar de ser investido en otro momento si consigue los votos suficientes. Así, ha asegurado que si más adelante concita los apoyos necesarios, lo intentará. “Mantengo mi candidatura, lo que sucede es que no tengo los votos suficientes”, ha respondido Rajoy, que tampoco sea plantea dimitir de su cargo en funciones.
El aún presidente en funciones ha negado que su actitud suponga una contradicción con lo que afirmó hace sólo unas horas, el jueves por la noche. En ese momento, Rajoy contestó con un “evidentemente” a la pregunta de si se sometería a la investidura. Y este viernes ha negado que se haya contradicho a sí mismo. “Es que me voy a presentar. Lo que no dije es cuándo”, ha respondido a los periodistas cuando abandonaba la sala de prensa.
Este movimiento estratégico de Rajoy pone el foco y la presión sobre Pedro Sánchez, que ahora será protagonista de una segunda ronda de contactos oficiales por parte del rey para comprobar si podría ser investido. Sobre la mesa del líder del PSOE está una propuesta de Podemos para un gobierno de coalición con Pablo Iglesias de vicepresidente, que varias voces socialistas han recibido con palabras de rechazo.
Rajoy ha descartado de plano que sea otro miembro del PP el que intente someterse a la investidura en su lugar. “La gente ha votado al PP con un candidato -ha afirmado-. La democracia hay que respetarla y los votos hay que respetarlos. El PP ha ganado y el PP tenía un candidato”. De esta forma, ha rechazado la idea propuesta por Esperanza Aguirre ante la Junta Directiva del PP de Madrid de hacer posible un gobierno a toda costa aunque suponga “sacrificios y renuncias personales”. La presidenta del PP madrileño ha llegado a ponerse como ejemplo por su oferta de retirarse para que gobernase la capital el socialista Antonio Miguel Carmona con tal de evitar que lo lograra Manuela Carmena.
Pese a que ha vuelto a defender que el único Gobierno que considera “sensato” para España es uno formado por su partido, el PSOE y Ciudadanos; no ha avanzado ningún detalle ni movimiento que esté dispuesto a realizar para concitar los apoyos necesarios. Lo único que ha reconocido es que intentará volver a hablar con Sánchez, después de quejarse de la poca receptividad que encontró en su primer y único encuentro hasta ahora: “No ha querido hablar conmigo, simplemente se ha negado, incluso cuando hubo un acuerdo en la Mesa lo negó. Espero que tenga a bien hablar con la gente pero tengo la sensación de que le gusta hablar con todos menos con el principal partido de España. Yo voy a seguir intentando hablar con él y con los otros, pero es evidente que ahora está en la opción de Podemos”.
Se ha negado a comentar su opinión sobre la oferta realizada por Pablo Iglesias a Pedro Sánchez y lo mal que ha sentado entre algunos exdirigentes socialistas como Alfredo Pérez Rubalcaba y Eduardo Madina, que lo ha calificado de “intento de humillación”. Rajoy ha negado que haya hablado con nadie del PSOE, pero ha adoptado un tono irónico cuando ha descartado opinar sobre “el señor Iglesias y las sonrisas del destino”.
Ante las acusaciones de inmovilismo y de falta de ofertas concretas para atraer a Sánchez y a Rivera, Rajoy ha confesado que no lo entiende. “Mis propuestas están claras, lo que me resulta sorprendente es que todavía me lo digan”, ha contestado antes de recordar que su recomendación siempre ha sido la coalición de gobierno de los tres partidos o un apoyo desde fuera a un Ejecutivo presidido por él.
El presidente en funciones ha trasladado su negativa al monarca durante la reunión que han mantenido desde las 17 horas. Antes han pasado por Zarzuela Pedro Sánchez y Pablo Iglesias. El líder de Podemos ha trasladado al rey su intención de apoyar un Gobierno presidido por el candidato socialista y en el que él ocupe la vicepresidencia siempre y cuando alcancen un acuerdo programático.
Sánchez no ha descartado poder llegar a un entendimiento pero ha dejado claro que ahora le tocaba a Rajoy. El presidente del PP también ha basado sus renuncia en el anuncio que se ha producido por parte de Podemos ya que, a su juicio, esa alternativa puede recabar más síes que su candidatura.
El movimiento del presidente del PP, sobre el que habían especulado cargos del partido ante las escasas posibilidades de éxito, cambia los planes. En el PSOE admitían este jueves que ser los primeros en someterse a la votación de investidura les perjudicaba por tener menos tiempo para negociar. Sin embargo, Rajoy aseguró que lo iba a intentar.
El rey ha pedido al presidente del Congreso que el lunes se reúnan de nuevo para que le haga llegar un listado de los portavoces de los partidos con representación a los que volverá a recibir. La nueva ronda de contactos comenzará el miércoles 27. Tras recibir de nuevo a todos los portavoces, el rey designará a un nuevo candidato para que se someta a la investidura.