Patxi López precipita su candidatura para cortar el paso a Pedro Sánchez
El anuncio de Patxi López de presentar su candidatura para liderar el PSOE tiene consecuencias: los socialistas tienen un aspirante a la secretaría general antes de que las primarias de mayo estén formalmente convocadas, y el intento de cortar el paso a Pedro Sánchez, que estaba en proceso de deliberación sobre si volver a intentar hacerse con el control de Ferraz.
Además, la gestora tiene complicado cumplir su objetivo de aparcar dos meses la crisis interna para trabajar por el proyecto político que vaya al congreso y con el que aspiran a volver a ser un partido de mayorías, como ha reclamado este mismo sábado el presidente de la gestora, Javier Fernández. El entorno de Susana Díaz asegura que el paso al frente de López no cambia sus planes.
La candidatura de López se ha ido fraguando desde hace varias semanas y se cerró este lunes en una reunión a la que asistieron varios secretarios generales críticos con la gestora. Algunas fuentes aseguran que un plan inicial era realizar un gran acto el próximo fin de semana en Euskadi.
El anuncio busca desactivar a Sánchez, que seguía analizando qué hacer. Los barones que permanecieron fieles al exsecretario general, entre ellos el que fue su número dos, César Luena, han virado y han impulsado la maniobra del exlehendakari, a quien ven con posibilidades de aglutinar el descontento hacia la gestora –y, por tanto, con Susana Díaz– y sumar a algunos dirigentes o cuadros intermedios que no estarían, en ningún caso, con Sánchez. También le ven con mejores condiciones para gestionar la situación posterior al congreso en el caso de que el sector crítico sea derrotado.
La decisión de López ha caído como un jarro de agua fría entre los 'sanchistas'. El exlehendakari llamó a Sánchez para avisarle de su candidatura minutos antes de que el anuncio trascendiera a los medios. Algunos de los interlocutores en esa ronda de llamadas, que ha incluido a destacados socialistas y a los presidentes autonómicos, incluidos Susana Díaz y Javier Fernández, sostienen que López les trasladó que pretende parar los planes del exsecretario general de volver a hacerse con el control de Ferraz.
En el entorno más próximo al exsecretario general guardan silencio y él ni siquiera se ha pronunciado por Twitter para apoyar de alguna manera al que fue un dirigente fiel y al que hizo presidente del Congreso. Los afines a Sánchez desdeñan la maniobra.
“La jugada es que no se presente Pedro y Patxi herede el descontento con Susana –dice un dirigente 'sanchista'–. La decisión tendría que haber sido de dos y no de parte”. López y Sánchez llevaban tiempo sin hablar y este sábado el exlehendakari le ha incluido en su ronda de llamadas para anunciarle la decisión.
“Busca golpear y ganar el espacio”
“Haciéndolo tan rápido busca ser el primero que golpee y ganar el espacio”, dice un miembro de la Ejecutiva de Sánchez, que considera que el exlehendakari debería haber actuado “de otra manera”. Pero da por hecho que el 'sanchismo' se sumará al barco: “No va a haber más de dos candidaturas”, sentencia. “Si van tres [López, Sánchez y Díaz] divides a una parte y la otra queda impune”, reflexiona un diputado madrileño, que considera que la presidenta andaluza sería la que no perdería ningún apoyo.
Sánchez sostuvo en un encuentro con periodistas en su reaparición en Valencia que él y López estarían en el mismo barco y frente a Díaz. “Con el mosqueo que se pilló entonces Patxi, hoy firma para que sea así”, dice uno de los próximos al exsecretario general.
Además, los 'sanchistas' no tienen claro que el diputado vasco vaya a conseguir retener el “capital” del exsecretario general, incrementado por el mantenimiento del “no es no” hasta sus últimas consecuencias, como fue la renuncia a su escaño. Precisamente uno de los objetivos de esa dimisión buscaba desactivar a López, que se abstuvo en la investidura de Mariano Rajoy.
“Pedro tiraba sin Patxi, pero Patxi sin Pedro no puede ganar”, expresa un dirigente. Hay otros, como los diputados José Luis Ábalos o Adriana Lastra, que advirtieron a López de que el capital de Sánchez entre los militantes era “intransferible”. Lo hicieron al secundar un manifiesto impulsado por cuadros intermedios del PSOE que animaron a Sánchez a presentarse a las primarias después de que algunos secretarios generales, como la vasca Idoia Mendia o la balear Francina Armengol, plantearon que diera un paso atrás para impulsar a López.
Otro de los gestos que en el PSOE afean al exlehendakari ha sido el momento elegido para anunciar su candidatura: apenas un par de horas después de que terminara el Comité Federal en el que se ha fijado la fecha para el congreso.
El diputado no ha tomado la palabra en esa reunión, ni siquiera para defender la postura de sus aliados, que querían que la disputa fuera en abril y no en junio, como ha planteado la gestora. López pasó a formar parte del Comité Federal cubriendo la vacante que se dejó en el PSE tras la disolución de la Ejecutiva con la dimisión de Sánchez (los miembros de la dirección federal, de la que López formaba parte, lo son también del Comité Federal durante su mandato).
Susana Díaz no cambia, de momento, su plan
El exlehendakari ha comunicado su decisión poco después de que terminara la reunión a los presidentes autonómicos -incluidos el presidente de la gestora, Javier Fernández, y la líder andaluza, Susana Díaz- y también a destacados socialistas, entre ellos Pedro Sánchez.
Luena es uno de los barones que sustenta la candidatura de López, junto con Idoia Mendia y Francina Armengol. Estos tienen sus federaciones bastante amarradas, pero Luis Tudanca (Castilla y León), Rafael González Tovar (Murcia) y Pilar Cancela (gestora de Galicia) tienen sectores alineados con la presidenta andaluza.
El PSC ha prometido neutralidad en el proceso, pero en el PSOE dan por hecho que el discurso del vasco arrasará entre la militancia catalana frente al de Díaz, que contará con el apoyo de Eduardo Madina para intentar contrarrestar en los territorios del norte.
En el entorno de Susana Díaz aseguran que la anticipación de López no va a cambiar sus planes. La presidenta andaluza sigue manteniendo la incógnita sobre su aspiración a liderar el PSOE. “Hoy no estamos en eso”, ha reiterado durante el Comité Federal.
Fuentes próximas a Díaz sostienen que los candidatos que tenga enfrente no influirán en su decisión así como tampoco la participación o no del PSC. Una opción que hay sobre la mesa es dejar sin voto a los 19.000 militantes catalanes tras el “choque de legitimidades” que se produjo en el proceso de investidura en el que los socialistas catalanes mantuvieron el 'no' frente a la abstención del PSOE.