El Congreso reedita las mismas conversaciones que hace seis meses. Las negociaciones para la composición de la Mesa del Congreso y la articulación del hemiciclo en grupos parlamentarios ya ha comenzado. En Comú Podem, la confluencia catalana de Unidos Podemos, defiende que debe tener un grupo propio y supedita su apoyo a Patxi López como presidente del Congreso a que el PSOE defienda que se organicen por separado. La dirigente de Podemos, Carolina Bescansa, ha conminado a los socialistas a que comiencen las negociaciones.
El portavoz de En Comú Podem, Xavier Domènech, ha reivindicado que su coalición ha ganado las elecciones generales en Cataluña en dos ocasiones como argumento suficiente para que las demás fuerzas parlamentarias les reconozcan como grupo parlamentario.
“Hemos expuesto un eje básico, que es el reconocimiento de que hay un espacio político en Cataluña que tiene una fórmula jurídica propia, que ha ganado las elecciones, tiene que verse reconocido como grupo parlamentario. Vamos a ver cómo se desarrolla”.
Domènech ha tenido ya conversaciones con los portavoces de PSOE y PP en el Congreso y no tiene esperanzas de que esta vez sí les reconozcan como grupo parlamentario por una cuestión “política”, según ha explicado. No obstante, condiciona el voto de sus diputados a Patxi López como presidente del Congreso a que el PSOE apoye la formación de un grupo propio para la confluencia catalana.
“Hay nuevas realidades y esta nueva realidad es En Comù Podem, que ha ganado por dos veces las elecciones, que cumple todos los requisitos y, por tanto, entendemos que esa realidad deberá ser aceptada. Para que nosotros podamos aceptar otras realidades debemos ser reconocidos”, ha respondido Domènech a la pregunta concreta de si En Comù Podem respaldará la candidatura de López.
Por su parte, la secretaria del grupo parlamentario de Podemos en el Cámara Baja, Carolina Bescansa, no ha descartado este miércoles la posibilidad de que los diputados de Unidos Podemos apoyasen al socialista Patxi López como presidente del Congreso, en esta nueva legislatura. Pero ha insistido en que el PSOE aún no les ha hecho propuesta alguna y que es el Partido Socialista quien debe tomar la iniciativa.
“Si no nos llaman, entendemos que se repetiría el acuerdo al que llegaron en torno a la Mesa del Congreso PP, PSOE y Ciudadanos en la anterior legislatura”, ha comentado Bescansa, quien ha emplazado a los socialistas a reconsiderar su posición e intentar “que exista una mayoría de progreso dentro de la mesa del Congreso y el Senado”.
La decisión sobre los grupos parlamentarios no depende solo del PSOE sino de la mayoría de la Mesa del Congreso. De acuerdo a la distribución de los escaños, al PP le corresponderían cuatro miembros; al PSOE, dos; y a Unidos Podemos, otros dos. Ciudadanos se quedaría fuera salvo que alcance un acuerdo con el PP o con el PSOE y le cedan uno de sus miembros.
Por otro lado, En Comú Podem ha reprochado a socialistas y PP que tengan en mente permitir que Convergència tenga grupo propio pese a que “no cumple los requisitos”. “Sería incomprensible que Convergència tuviera grupo propio y que no lo tuviéramos nosotros cuando cada vez es más evidente que no es un problema real sino político”, ha concluido Domènech.